Las dietas milagro para perder peso son dietas que hacen perder peso rápidamente, pero, al ser dietas carenciales, su mayor problema es que pueden producir daño en el organismo si se mantienen a largo plazo. En la mayoría de ocasiones, no cambian nuestra forma de alimentarnos y, por tanto, esto se traduce en que, tras abandonar la dieta, el peso se recupera de forma rápida. Por tanto, las dietas milagro no son dietas recomendables a nivel médico y no deben realizarse en personas que tengan problemas de salud, ya que, para estas personas, pueden dar lugar a complicaciones de sus problemas de base.
Entre las dietas milagro se encuentra la dieta del limón.
La dieta del limón es una dieta hipocalórica (baja en calorías) y diurética (ayuda a perder líquidos) que contribuye a perder peso de forma rápida. No obstante, es una dieta que no permite mantener la pérdida de peso, ya que, al dejar de perder líquidos y recuperar nuestra alimentación normal, se vuelve a recuperar el peso rápidamente. No es una dieta que se pueda mantener a largo plazo, su única finalidad es perder peso para un momento concreto. No es recomendable para personas con problemas de salud crónicos y, las personas que tienen problemas de estómago, deben usarla con precaución, ya que pueden aumentar sus molestias gástricas.
La dieta del limón es una dieta cuyo principal beneficio es la pérdida rápida de peso. El limón actúa como diurético, con lo cual, ayuda a perder líquidos y tiene como beneficio el ayudar al tránsito intestinal correcto, por eso, se considera una dieta desintoxicante. Y, aunque no está probado en humanos, parece que puede aumentar la inmunidad en los ratones. También se postula que puede actuar como antioxidante del organismo, aporta al organismo potasio y otras vitaminas.
La dieta de limones recomendable para personas sanas que quieran perder peso de forma muy rápida por alguna circunstancia concreta. Se debe conocer que esta pérdida de peso no se va a mantener a largo plazo y que se debe realizar una alimentación saludable con posterioridad. Es una dieta que no se debe mantener más allá de cinco días, debido a que es una dieta carencial. Además, no se debe repetir de forma continuada y bajo ninguna circunstancia se debe repetir antes de dos meses.
La dieta del limón debe constar de al menos un vaso de agua de limón de unos 200 ml en cada comida. El agua no debe ser fría, sino templada; se exprime el zumo de un limón y se puede endulzar con estevia o miel. Ejemplo de un plan de dieta del limón diario:
Primer día:
Segundo día:
Tercer día:
Cuarto día:
Quinto día:
La dieta del limón se tiene que realizar durante cinco días, en algunos casos, se pueden encontrar hasta una duración de unos siete días. No se debe realizar por más tiempo, ya que, se trata de una dieta carencial, que puede causar daño al organismo si se realiza durante más tiempo. En ninguna circunstancia se debe repetir antes de dos meses y, se debe de tener en cuenta que se puede recuperar el peso rápidamente tras dejar la misma.
La dieta de limón no se realiza en ayunas, se suele complementar con otros alimentos que ayudan a aportar energía y proteínas de las que carece el limón. El zumo de limón de la mañana es lo primero que tomaremos, el resto del día, se complementará el zumo de limón con otros alimentos. No es una dieta pensada para tomar solo zumo de limón, si se realiza de esa manera, puede perjudicar nuestra salud de forma muy importante.