La alergia a los ácaros o al polvo es la reacción alérgica que experimentan algunas personas cuando hay presencia de unos insectos de la familia de los arácnidos, microscópicos, que están presentes en el polvo. Los ácaros crecen en ambientes cálidos, húmedos, y se alimentan de las células de la piel que perdemos. Se encuentran sobre todo en las en las sábanas, toallas, tapicería, alfombras y en el suelo.
No existen diferentes tipos de alergia a los ácaros.
Las causas de la alergia a los ácaros son sus restos fecales que diariamente pueden llegar a producir hasta 20 partículas.
Nuestro sistema inmunitario reacciona ante una sustancia extraña produciendo una respuesta inflamatoria de las vías respiratorias, cuando la exposición es prolongada, puede producir asma.
Los ácaros pueden llegar a estar presentes entre 100 y 500 por gramo de polvo, y sus alérgenos solo son detectables cuando el polvo está en movimiento, es decir, cuando se barre, se limpia el polvo o se sacude la ropa de cama.
Los síntomas principales de esta alergia son:
El tratamiento de la alergia a los ácaros puede ser:
Las pruebas complementarias para la alergia pueden ser:
El factor desencadenante es una respuesta del sistema inmunológico ante un agente alérgeno como son los excrementos de los ácaros presentes en el polvo.
Hay una serie de factores de riesgo como:
Las complicaciones de la alergia a los ácaros puede ser asma e incluso reacciones alérgicas graves como la anafilaxia.
También pueden aparecer infecciones en vías respiratorias y senos paranasales.
La prevención de los ácaros consiste principalmente en reducir la exposición a estos alérgenos, debido a que es muy difícil eliminarlos del polvo. Para ello se debe:
El tratamiento de la alergia a los ácaros pertenece a la especialidad médica de Alergología.
Los ácaros se encuentran en el polvo y en la ropa de cama, toallas, alfombras, almohadones o tapicerías.
Los ácaros tienen una vida media de entre 10 y 19 días.
Las alergias se producen porque el sistema inmunológico reacciona ante la exposición a un alérgeno.
Existen diferentes tipos de alergia, las más comunes son la alergia al polen, a los ácaros, a los hongos, a ciertos medicamentos, al pelo de animales, a algunos alimentos y al látex, entre otras.