El hipotiroidismo es el descenso de la hormona tiroidea por debajo de niveles normales, que se produce porque la glándula tiroidea no es capaz de producir suficiente hormona. Se conoce también como bocio, ya que se produce un aumento del tamaño de la glándula en el cuello para producir la hormona necesaria. El hipotiroidismo se presenta entre el 2,4 y 3,5 por cada cada mil habitantes en España y de todos ellos el 64% son de origen autoinmune. Además, es más frecuente en mujeres. Puede provocar coma mixedematoso, que puede llegar a ser mortal, pero el hipotiroidismo se considera una enfermedad crónica leve.
Los tipos de hipotiroidismo son:
La causa más frecuente es la tiroiditis de Hashimoto, que es una causa autoinmune, en la cual las células de defensa del organismo van a destruir el propio tiroides. Esto es más frecuente en mujeres mayores de 40 años.
Otras causas son las quirúrgicas, que den lugar a extirpación del tiroides por nódulos o cánceres tiroideos, el uso de yodo radioactivo para tratar el hipertiroidismo, y los fármacos para el tratamiento de arritmias cardiacas como la Amiodarona.
Los síntomas del hipotiroidismo son diversos, ya que la hormona tiroidea actúa como reguladora de múltiples funciones, pudiendo dar lugar a cansancio, aumento de peso, estreñimiento, intolerancia al frío, piel pálida y seca, edema facial, dolores musculares, elevación del colesterol, dolor y rigidez de las articulaciones, así como cambios en el ciclo menstrual, pelo y uñas quebradizas y olvidos frecuentes.
El tratamiento para el hipotiroidismo es el aporte de hormona tiroidea sintética. Esta sustancia se llama Levotiroxina, y su dosis será variable para cada persona, además de poder variar con el tiempo en una misma persona.
Las pruebas serán analíticas de sangre con determinación de hormona tiroidea, TSH (hormona que produce la hipófisis para estimular la tiroides), y los anticuerpos antitiroideos. En algunos casos pueden ser necesarias pruebas de imagen como ecografías o gammagrafías tiroideas.
En la tiroiditis de Hashimoto la causa desencadenante es la producción de anticuerpos antitiroideos por parte del propio organismo, atacando a su propia tiroides.
Los factores de riesgo para el hipotiroidismo son la edad, tener antecedentes familiares de enfermedades tiroideas, tratamiento con yodo radioactivo y haber recibido radioterapia a nivel del cuello.
En el hipotiroidismo congénito las principales complicaciones son el retraso mental, alteraciones del habla, retraso en el crecimiento y retraso en la madurez física.
En el hipotiroidismo en adultos la principal complicación es el mixedema, que puede conducir al coma.
No hay formas conocidas de prevenir el hipotiroidismo.
El hipotiroidismo se trata a través del endocrinólogo.
La glándula tiroides es la glándula que produce la hormona tiroidea, se centra en la parte delantera del cuello y que tiene dos lóbulos, uno derecho y otro izquierdo que se unen por medio de un puente en el centro. Cada lóbulo tiroideo mide entre 4 y 6 cm.
Es posible que presentar hipotiroidismo produzca ganancia de peso, de hecho, es uno de los síntomas que puede hacer llegar al diagnóstico de esta enfermedad, pero en el momento que el paciente empiece a tener tratamiento con hormona tiroidea su peso volverá a ser normal.
El hipertiroidismo es cuando la tiroides produce más hormona de la que se debe, por tanto hay un nivel hormonal elevado, en el hipotiroidismo se produce una disminución de hormona, esto quiere decir que la tiroides produce menos hormona de la necesaria.
Se denomina hipotiroidismo gestacional. La relación de hipotiroidismo y embarazo es que una persona embarazada no debe estar hipotiroidea ya que aumenta el riesgo de complicaciones en el embarazo y se produce un mayor número de abortos.