La cistectomía parcial es la exéresis o extirpación de una parte de la vejiga. Es secundario a procesos tumorales, que deben ser menores de 3 cm. y estar alejados de cuello vesical.
En primer lugar se procede a someter al paciente a anestesia general; tras ello, se realiza una incisión en zona del abdomen (suprapúbica) y se procede a visualizar la vejiga y a extirpar la zona afectada por el tumor dejando un margen de seguridad de unos dos centímetros. Se debe realizar una biopsia de los ganglios linfáticos para tratar de valorar posible extensión en dicha zona, y tras ello, se procede a la sutura de la vejiga y de la zona abierta en el abdomen.
La cistectomía parcial está indicada para pacientes que presentan lesiones tumorales malignas de menos de 3 cm y que se pueden beneficiar de una extirpación parcial de la vejiga. Esto permite mantener la función de la vejiga y no portar una bolsa de urostomia.
La cistectomía parcial se realiza porque presenta una preservación de la función anatómica de la vejiga, dando una mayor calidad de vida al paciente y permitiendo buenos resultados en tumores de tamaño pequeño que no afectan el cuello vesical.
Los riesgos de la cistectomía parcial serán reacciones a la anestesia por alergias no conocidas, hemorragias y hematomas en la zona de la herida, puede presentarse hematuria, infecciones. En algunos casos puede haber recidiva del tumor que pueden ser retirados por cistoscopia
La preparación para la cistectomía parcial será analítica de sangre con recuento celular para valorar la posibilidad de una anemia, analítica de orina con cultivo para descartar una posible infección, radiología de tórax y electrocardiograma, seguidos de consulta con el anestesista.
Será necesaria la realización de pruebas de imagen como ecografía y TAC, que permiten conocer el tamaño y localización tumoral, así como descartar posibles metástasis.
La recuperación de la cistectomía parcial es algo lenta, aunque con mejores resultados que cuando se hace una cistectomía radical. El paciente deberá llevar una sonda durante unos días, hasta que la vejiga esté correctamente cicatrizada. Por otra parte, el tamaño de la vejiga será menor y esto hará que el paciente tenga que orinar cada menos tiempo.
Debe calcular al menos tres meses hasta poder incorporarse a su trabajo.
Los resultados de la cistectomía parcial son buenos, dando lugar a una mejor calidad de vida que una cistectomía radical. De todas formas, hay que tener en cuenta que en muchas ocasiones el tumor puede aparecer en otra zona de la vejiga, siendo necesario realizar una exéresis del mismo por cistoscopia.
La cistectomía radical es la extirpación total de la vejiga, dando lugar a urostomia. En ella los uréteres serán abocados al abdomen y se recogerá la orina mediante una bolsa colectora que se situará sobre la urostomia. En algunas ocasiones se puede realizar una vejiga a partir de una bolsa de intestino. El médico indicará la técnica elegida en función del paciente
La neovejiga es la formación de una vejiga a partir de un asa de intestino grueso. Para ello se preserva la uretra y el esfínter vesical del paciente, que se conecta al asa de intestino, el cual se ha colocado en la situación anatómica de la vejiga, y en la cual se han anastomosado los uréteres. Es una técnica quirúrgica cuyo fin es mantener la anatomía en su forma más fisiológica.
El cáncer de vejiga es un tumor maligno que se localiza en el interior de la vejiga. Es el cáncer más frecuente urinario y se inicia en las células que recubren el interior de la vejiga. Es un cáncer de células escamosas. El 80% de los tumores de vejiga suelen ser superficiales, pero tienden a reproducirse en otras zonas de la vejiga tras ser extirpados. Una de las principales causas de este tumor será el fumar, por ello, es más frecuentes en hombres a partir de 60 años.
La resección transuretral de vejiga es la extirpación de tumores superficiales de la vejiga a través de una cistoscopia, la cual, para realizarse, necesita la introducción de un cistoscopio, en cuya punta va una cámara que permite ver el interior de la vejiga, y a través de él se puede introducir material quirúrgico que permite la resección del tumor y la extracción del mismo a través de la uretra. Esto permite retirar tumores superficiales y pequeños de la vejiga.
Un TM vesical es un tumor maligno vesical que se produce en las células superficiales de la vejiga, siendo el tumor urológico más frecuente. La mayoría suelen ser superficiales cuando se encuentran pero tienden a recidivar con facilidad.