La Hidroterapia es una terapia acuática que utiliza el agua para prevenir enfermedades y lesiones. Es un método terapéutico donde se emplean conocimientos fisioterapéuticos de rehabilitación. Este tratamiento ofrece muchos beneficios a las distintas patologías del aparato locomotor. Permite relajar los músculos, facilitar el ejercicio, aliviar el dolor y el movimiento gracias a la flotabilidad, mejora la estabilidad y el equilibrio.
Es una herramienta muy valiosa sobre todo cuando se trata de traumatismos, reumatismos, enfermedades neurológicas o de enfermedades respiratorias. La hidroterapia consiste en utilizar el agua como elemento terapéutico, en cualquier forma, estado o temperatura, sus beneficios son consecuencia del uso de agentes físicos como la temperatura y la presión.
La patología a tratar del paciente indicará la forma de aplicación de la hidroterapia, ya que las sesiones deben ser personalizadas, y en función de las necesidades que tengan, se emplea la técnica y el tiempo de duración indicada para cada sesión.
La hidroterapia tiene múltiples tratamientos que se adaptan a las condiciones físicas y patológicas de los pacientes. Entre los principales tratamientos están:
La hidroterapia está indicada para tratar las patologías que puedan afectar al aparato locomotor y la movilidad de las articulaciones, entre ellas están: Artritis, Esclerosis lateral, enfermedades con alteración del equilibrio y la coordinación, Esclerosis múltiple, patologías vasculares y patologías mecánicas, Fibromialgia y atrofias musculares, entre otras patologías. La hidroterapia también está indicada para tratar secuelas de las heridas por traumatismo.
Porque las propiedades físicas del agua le brindan numerosos beneficios al proceso de rehabilitación, entre ellos facilitar el movimiento y reducir el impacto de las articulaciones.
Es un tratamiento que se realiza para recuperar la capacidad funcional de la zona afectada del paciente, restaurar habilidades, mantener o preservar la movilidad, prevenir secuelas, y disminuir el dolor de las lesiones.
El agua es la herramienta clave para que la recuperación sea lo más temprana y progresiva posible.
Entre los riesgos más frecuentes tenemos: la hidrocución (corte de digestión o síntoma digestivo que se producen cuando existe un choque térmico), la lipotimia (pérdida repentina y transitoria del conocimiento), determinada por la entrada y permanencia en el agua, que puede manifestarse a la salida o durante el baño. Manifestación de edema y urticaria, localizados en la parte del cuerpo que ha estado en contacto con el agua fría, la alteración de la coagulación al estar en contacto con el agua fría
Antes de iniciar cualquier sesión de hidroterapia, el paciente debe consultar con su médico o fisioterapeuta los tratamientos y procedimientos que se adaptan mejor a la condición del paciente. Una vez establecido el tratamiento se le indicará la preparación a seguir. Normalmente en todas las sesiones de hidroterapia se debe asistir con ropa con la que el paciente se sienta cómodo.
Después de terminar la sesión de hidroterapia, los resultados son casi inmediatos. El tiempo de recuperación es casi mínimo. Los tiempos varían según la lesión del paciente y el tratamiento de hidroterapia utilizado. En algunos casos, después de terminar el tratamiento, los pacientes pueden presentar pocas dolencias en las articulaciones.
Son muy satisfactorios para el paciente, ya que gracias a la terapia en el agua, se consigue aliviar las molestias ocasionadas por lesiones físicas; incrementa la amplitud del movimiento articular; mejora la condición física; mejora notablemente la resistencia aeróbica; así como la coordinación general, el equilibrio, la fuerza, la resistencia, la flexibilidad y velocidad; ayuda a la cicatrización de lesiones y ayuda a prevenir otros factores de riesgo de enfermedad o lesión.
La hidroterapia de colon es un tratamiento que se hace para la limpieza intestinal y que consiste en introducir agua tibia en el colon a través de una cánula, (tubo que se utiliza para evacuar o introducir líquidos en el cuerpo)especial y desechable, que ayuda a eliminar las toxinas acumuladas y al saneamiento intestinal.
Es recomendable entre 2 y 3 sesiones. La cantidad de sesiones dependerá del caso y del paciente.
Es un tratamiento totalmente indoloro. Durante el procedimiento, el paciente se encuentra cómodamente recostado en una camilla mientras se realiza el tratamiento. Una vez finalizada la sesión, el paciente puede continuar con su vida normal.
Una sesión de hidroterapia de colon dura generalmente entre 30 y 50 minutos.
Para poder realizar una nueva sesión, tienen que pasar como mínimo, de 48 a 72 horas.