Un reconocimiento médico es un examen completo realizado al paciente con el fin de conocer su estado de salud general y así prevenir y poder detectar de forma precoz enfermedades, o averiguar si se encuentra en buenas condiciones físicas y psicológicas para desempeñar alguna actividad o trabajo específico. A un reconocimiento médico también se le denomina chequeo, revisión o control médico.
Existen diferentes tipos de reconocimientos médicos:
Según el objetivo buscado:
Según el momento de realización:
Cuando se acude a un reconocimiento médico se deben tener en cuenta una serie de recomendaciones para agilizar y facilitar el trabajo del personal sanitario:
El paciente debe acudir en ayunas, llevar consigo sus gafas u otros correctores visuales o auditivos si los usa, no fumar ni ingerir alcohol las horas previas, llevar los informes médicos recientes y el certificado de minusvalía si los tuviera, y ser completamente sincero durante el chequeo.
Para comenzar el reconocimiento completo, el médico reúne el historial clínico de antecedentes familiares, personales y laborales, y recoge por escrito todos los datos del paciente.
Asimismo, mide los datos biométricos (peso y estatura), para calcular el índice de masa corporal y procede a tomar el pulso y la tensión arterial. De igual modo, realiza la exploración física del aparato locomotor, abdominal, dermatológica, neurológica y auscultación respiratoria y cardíaca.
Según el objetivo del certificado médico o del reconocimiento, se pueden requerir realizar unas pruebas complementarias como un análisis de sangre y de orina (hemograma completo, bioquímico, perfil tiroideo, perfil lipídico, marcadores tumorales específicos, antígenos y anticuerpos para hepatitis), y otras pruebas como electrocardiograma, espirometría (para medir la capacidad funcional de los pulmones), audiometría, tonometría, revisión oftalmológica, test de Framingham (para medir el riesgo cardiovascular), revisión urológica o ginecológica, exploración radiológica…etc.
Si el reconocimiento médico es deportivo, además se realiza un test de esfuerzo, mediante el cual se monitoriza la prueba y se comprueba el rendimiento del deportista.
Y si el reconocimiento médico está destinado a la obtención de la licencia de armas, se pedirá también un test de drogas mediante un análisis de orina.
Muchas empresas ofrecen a sus trabajadores la posibilidad de someterse a un reconocimiento médico anual, pero el trabajador puede negarse a dar su consentimiento. El reconocimiento médico no es obligatorio salvo para aquellos trabajadores que estén poniendo en peligro su vida, la de sus compañeros o la de otras personas mientras desarrollan su actividad laboral.
Si el trabajador se niega a someterse al reconocimiento médico, pero este es voluntario, la empresa deberá recogerlo por escrito y firmado por el trabajador para que, si hubiese una inspección laboral, no se sancionase a la empresa. Por el contrario, si el reconocimiento médico es obligatorio, pero el empleado se niega, la empresa podría sancionar al trabajador para que no se penalice a la empresa.
Si el trabajador da su consentimiento para realizarse el reconocimiento, y los médicos encuentran alguna anomalía o afección, procederá a comunicárselo al paciente tratando de calmar a este y derivando al especialista indicado en su caso, para que le haga el resto de pruebas necesarias y poder empezar un tratamiento y hacer un seguimiento de la evolución de la enfermedad. También le comunicarán si esa patología le impide ser apto o no para la actividad o trabajo por el que se ha examinado.
Los resultados del reconocimiento médico le deben llegar al paciente de manera confidencial junto con una serie de recomendaciones médicas o medidas de protección y prevención si estas hicieran falta. Los resultados pueden entregarse directamente en mano al paciente o enviárselos por correo postal, por correo electrónico, o notificándose por teléfono móvil y accediendo al informe mediante una clave facilitada.
En el informe o certificado se entregan las conclusiones o el resultado del reconocimiento como:
En el reconocimiento médico laboral, el informe le llegará al paciente y también a la empresa de forma confidencial (siempre que el trabajador haya dado permiso) por la Ley Orgánica de Protección de Datos. Si no autoriza que la empresa conozca los datos del informe, a esta solo se le remitirá el resultado final del examen “apto” o “no apto”.
Un reconocimiento médico laboral es un examen que realizan las empresas destinado a verificar el estado de salud del trabajador, para comprobar que este puede desempeñar adecuadamente su actividad laboral, y dirigido a detectar problemas de salud relacionados con los riesgos de cada puesto de trabajo.
Un reconocimiento médico normal puede requerir un análisis de orina y de sangre, pero ninguno de estos exámenes determinará la presencia de drogas. No obstante, puede solicitarse un test de drogas (bajo el consentimiento del trabajador) en puestos de trabajo específicos, como por ejemplo pilotos aéreos o si el puesto requiere la tenencia de armas.
Un reconocimiento médico deportivo es una revisión médica realizada para valorar el estado de salud general y la condición física del deportista mediante un test de esfuerzo. El chequeo es útil también para detectar y prevenir lesiones que le puedan impedir continuar practicando la actividad deportiva sin riesgos.
No existen diferencias entre un reconocimiento y un chequeo, ambos son exámenes médicos que permiten conocer el estado de salud general de una persona.