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Cirugía Ortopédica y Traumatología

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Gonalgia o dolor de rodilla: tratamientos
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Gonalgia o dolor de rodilla: tratamientos

Las complejas características anatómicas de la rodilla determinan que se trate de una articulación frecuentemente afectada por traumatismos, así como por procesos inflamatorios y degenerativos. El dolor es un síntoma también frecuente en la rodilla. ¿Qué es la gonalgia? La gonalgia es un término general que hace referencia a la aparición de dolor en la rodilla. Este puede estar causado por múltiples factores, incluyendo los de naturaleza traumática. Afecta a un 20-25% aproximadamente de la población adulta y su prevalencia ha aumentado un 65% en los últimos 20 años. No en vano, la rodilla es una de las estructuras del aparato locomotor más complejas, debido a la cantidad de estructuras que la componen. Juega una importancia primordial en la estabilidad y el desplazamiento, viéndose sometida a fuertes cargas y rápidos cambios de dirección. La gonalgia puede aparecer junto a otros síntomas y signos: Inflamación y rigidez Enrojecimiento y aumento de la temperatura al tacto. Sonidos de chasquidos, crujidos o sensación de bloqueo. Incapacidad de realizar determinados movimientos con la articulación. Las causas de la gonalgia se podrían dividir en dos grandes grupos: Origen traumático . El traumatismo directo, la torsión excesiva de rodilla con pie fijo en suelo o la caída con golpe sobre las rodillas pueden producir desde una simple contusión, pasando por una lesión de ligamentos y meniscos, hasta una lesión ósea o procesos de recuperación tras una cirugía. Origen no traumático . El dolor en la rodilla puede deberse a enfermedades como los procesos degenerativos, reumáticos o infecciosos. Entre ellos destacan la artrosis , artritis reumatoide (se produce destrucción de la articulación debido a mecanismos autoinmunes), gota o acumulación de cristales de ácido úrico y pseudogota por cristales de calcio, y artritis séptica por infección directa del espacio Posibles causas de gonalgia La gonalgia puede ir asociada a una gran variedad de lesiones de rodilla afectando a cualquiera de los tejidos que forman parte de ella, incluyendo ligamentos, tendones o bolsas sinoviales de la articulación. Es por ello que una parte fundamental del proceso será realizar un diagnóstico diferencial exhaustivo. Dentro de estas lesiones las más habituales en consulta suelen ser: Artrosis . Su existencia suele estar relacionada con la edad, aunque existen muchos otros factores. Es más común en adultos de entre 70 y 74 años. Los síntomas principales son el dolor que puede empeorar con el inicio de la marcha y la limitación del rango articular de la rodilla. Se trata de una patología de evolución progresiva Procesos inflamatorios articulares . El signo característico es la tumefacción (inflamación). El examen físico puede mostrar si el proceso inflamatorio es extra o intraarticular. Bursitis . Se trata de lesiones localizadas bien delimitadas en el caso de la Pueden aparecer en la zona anterior de la rodilla (bursitis pre rotuliana) o en la zona lateral (bursitis anserina). Tenidopatía rotuliana . Un exceso de cargas repetitivas sobre el aparto extensor de la rodilla puede llegar a producir la aparición de los síntomas, que generalmente suele ser dolor en la cara anterior de la Síndrome patelofemoral . Se trata de la principal causa de dolor en la cara anterior de la rodilla entre adolescentes y adultos menores de 60 años. Su causa es multifactorial y será fundamental realizar un buen examen y exploración. Alteración intraarticular y ligamentosa . Suele acompañarse de antecedentes traumáticos y rotura de los ligamentos o meniscos de la rodilla. Esto origina derrame articular y sensación de inestabilidad, bloqueo de rodilla en semiflexión o incapacidad Tratamiento de la gonalgia El tratamiento de la gonalgia variará en función de su causa. Fisioterapia Las diferentes técnicas y herramientas de fisioterapia, así como una correcta administración y dosis de diferentes tipos de ejercicio y contracciones musculares en función de la patología, irán encaminadas en la reducción del dolor y en la rehabilitación de la lesión si fuera posible. Tratamiento farmacológico Tratamientos específicos . Medicamentos indicados propiamente para enfermedades como la gota o artritis reumatoide. AINES . El uso y utilidad de los antiinflamatorios no esteroideos se limita a las fases agudas. Inyecciones articulares . Puede incluir la inyección en la rodilla de corticoides, ácido hialurónico o plasma rico en plaquetas para reducir la inflamación y el dolor. También pueden mejorar la movilidad y favorecer la cicatrización. Cirugía En algunos casos, la cirugía es el único método para reparar el problema articular. Puede realizarse a través de artroscopia, con pequeñas incisiones, para reparar cartílago y ligamento. También puede realizarse cirugía abierta en el caso de reemplazo de rodilla. Otras terapias Otro tipo de terapias o estrategias para minimizar la gonalgia incluyen el reposo, la ortesis o empleo de plantillas especiales en algunas patologías degenerativas, vendajes funcionales, estimulación eléctrica y la disminución de peso. Si una gonalgia no es tratada a tiempo puede ocasionar lesiones osteocondrales residuales y recurrentes con alteraciones en los mecanismos de extensión y flexión, lo que se traduce en importantes alteraciones de la movilidad y limitación funcional.     Preguntas frecuentes ¿Qué diferencia hay entre gonalgia y gonartrosis? La gonalgia es un término que hace referencia al dolor en la articulación de la rodilla de forma general, generalmente como síntoma, en cambio, la gonartrosis, es una enfermedad articular crónica degenerativa y progresiva de la rodilla, que seguramente curse con gonalgia. ¿Se puede realizar ejercicio padeciendo gonalgia? El ejercicio ha demostrado ser beneficioso en la mayoría de las lesiones de rodilla. Es importante −siempre que esté indicado para su patología− realizar los ejercicios sin dolor. La monitorización de la dosis, la carga y el dolor durante el ejercicio serán fundamentales para realizar una buena administración del mismo. Es recomendable que consulte con su médico o fisioterapeuta los distintos ejercicios y frecuencia, dado que una mala gestión puede ser perjudicial. ¿Cuáles son las pruebas complementarias en caso de gonalgia? La mayoría de las patologías de rodilla pueden ser diagnosticados con la realización de una historia clínica, un examen físico y los estudios radiográficos pertinentes. Tras realizar el examen físico articular, el médico traumatólogo puede indicar alguna de las siguientes pruebas diagnósticas: Rayos Permite descartar enfermedades degenerativas y fracturas. Tomografía axial computerizada (TAC). Este método permite obtener imágenes radiográficas desde diferentes planos. Ecografía. Produce imágenes en tiempo real de las estructuras del tejido blando del interior y alrededor de la rodilla. Resonancia Magnética. Puede ser de utilidad para lesiones de ligamentos, cartílagos, músculos, tendones y tejido óseo. Análisis del líquido articular. El examen del líquido sinovial puede ser útil en diversos procesos como la artritis infecciosa y las artritis
Ejercicios para mejorar la movilidad articular
Artículo especializado

Ejercicios para mejorar la movilidad articular

La elasticidad, flexibilidad y la movilidad, junto con un buen tono muscular, son elementos importantes dentro del estado de forma física y para la salud de nuestras articulaciones. El sedentarismo y la edad, junto con otros factores como las deformidades óseas, la debilidad muscular, el dolor y los problemas articulares,  pueden contribuir a su disminución. Cuando existen problemas articulares la realización de actividad física, adaptada a la patología que presente el paciente y que no sobrecargue las articulaciones, es imprescindible para mejorar su funcionamiento, preservar el estado de la articulación y aliviar el dolor, si existe. Este es el caso de actividades como caminar, elíptica, ir en bicicleta, la gimnasia acuática o la natación. El cuidado de las articulaciones, con la práctica de ejercicios de fortalecimiento, de bajo impacto sobre las mismas y estiramientos en rango de movimiento no doloroso, puede contribuir a la salud física y a una mejor movilidad articular, preservando la función y un buen estado, o frenando el desgaste de estructuras articulares tan importantes como los cartílagos. ¿Qué es la movilidad articular? La movilidad articular es la capacidad de movimiento de las articulaciones. Esta puede variar mucho de unos individuos a otros. La articulación es una estructura que se sitúa en la unión de dos huesos y que, normalmente, consta de una cápsula articular, ligamentos y cartílagos y se encuentra recubierta por una membrana sinovial que las nutre y protege. Por la edad, la pérdida de masa muscular, los traumatismos, el sedentarismo o diversas patologías, se pueden producir daños en las estructuras articulares, que perjudican la capacidad de movilidad de la articulación de forma parcial o total. La limitación funcional de la articulación, derivada de una pérdida importante de movilidad de la misma, recibe el nombre técnico de anquilosis . La movilidad normal de las articulaciones no tiene que producir dolor y debe ir asociada a una adecuada flexibilidad de los músculos, ligamentos, tendones y estructuras adyacentes a la articulación. Es importante que la capacidad de movimiento articular sea elevada para gozar de una buena salud física. Los ejercicios de movilidad articular son esenciales para asegurar la preparación de las diferentes estructuras y tejidos frente a la actividad física. Mejores ejercicios de movilidad articular La movilidad articular está relacionada con la flexibilidad, la elasticidad y la amplitud de movimiento. La práctica de ejercicio físico de manera regular determina un menor riesgo de perder movilidad. Previamente al desempeño de cualquier actividad física, es necesario llevar a cabo ejercicios de calentamiento. Estos tienen la finalidad de preparar a los diferentes tejidos para afrontar la mayor demanda fisiológica que se produce al realizar la actividad física. De este modo, se consigue una preparación y acondicionamiento de las diferentes estructuras, se retrasa la aparición de fatiga y se disminuye el riesgo de sufrir lesiones. Algunos ejercicios de movilidad articular pueden incluir: Cuello Flexionar y extender, suave y lentamente, el cuello con movimientos de cabeza hacia arriba y hacia abajo. De igual modo, mover el cuello haciendo rotar circularmente la cabeza, de forma muy suave y lenta, en uno y otro sentido. En personas que tengan antecedentes de problemas cervicales es conveniente realizar estos ejercicios muy suavemente y preferentemente sentados, para evitar que una mala ejecución de los ejercicios les produzca mareos. Hombros Manteniendo los brazos pegados al cuerpo, levantar los hombros y llevarlos hacia atrás y hacia adelante en un movimiento circular. Por otro lado, poner los brazos en cruz y hacer movimientos circulares alternativamente hacia adelante y hacia atrás. Brazos y muñecas Estirar los brazos y flexionar los codos llevando la mano hasta tocar la espalda. Mover las muñecas en círculos en uno y otro sentido. Por otro lado, flexionar las muñecas llevando las manos hacia arriba y abajo. Piernas, rodillas y tobillos Apoyados en el respaldo de una silla, elevar alternativamente las piernas hacia adelante y recorrer un semicírculo hacia atrás. Sentados en una silla hacer rotar alternativamente los tobillos en ambos sentidos. Doblar la rodilla, sujetando el pie con la mano por detrás de la pierna. Columna y caderas Situarse a cuatro patas y, alternativamente, arquear la espalda hacia arriba y hacia abajo. Tumbados boca abajo, dejar en contacto el vientre con el suelo y arquear la espalda, estirando las piernas y la parte superior del tronco hacia arriba. Hay que señalar que los ejercicios de movilidad articular no deben contemplarse de manera aislada, sino que deben ir acompañados de ejercicios de fuerza y resistencia. Por otro lado, una parte esencial de los ejercicios y estiramientos radica en su ejecución, ya se trate de estiramientos estáticos o dinámicos . Movilidad articular en adultos mayores Es especialmente importante que las personas mayores realicen actividad física de forma regular, incluyendo ejercicios de movilidad articular, aeróbicos y de fuerza. Estos deben estar siempre adaptados individualmente, por un profesional, a las características funcionales y patológicas de cada sujeto. En cuanto a la movilidad articular, se deberá prestar especial atención a situaciones y patologías como la inflamación, el desgaste o el dolor en las articulaciones. Tobillos Sentados en una silla con los pies descalzos y reclinados hacia atrás, deslizar las piernas rectas hacia adelante. A continuación, doblar el pie intentando acercar los dedos lo máximo posible a la espinilla y después alejarlos. Por otro lado, rotar el tobillo en un sentido y en otro, describiendo circunferencias completas. Realizar los ejercicios primero con el pie derecho y después con el izquierdo. Muñecas Colocar las manos juntas como en la posición de rezar. Elevar los codos hacia afuera hasta que los brazos queden paralelos al suelo sin separar las manos. Permanecer en esta postura 30 segundos. Hombros Tumbarse boca arriba con la cabeza apoyada en un cojín. Mantener los hombros pegados al suelo y estirar los brazos con los codos doblados y girarlos hacia detrás y adelante. Repetir 5 o 10 veces. Movilidad de cadera Tumbarse boca arriba con las rodillas dobladas juntas y los pies con la planta en el suelo. Con los hombros pegados al suelo y los brazos en cruz, bajar las rodillas lentamente hacia uno y otro lado, alternativamente, permaneciendo abajo unos segundos en cada lado. Repetir de 5 a 10 veces. Rodillas Sentados en una silla, extender la pierna lentamente hasta que esta quede recta y mantenerla en esta posición unos segundos. Seguidamente, descender lo más lento posible, hasta la posición inicial. Repetir con la otra pierna. Hacer 10 repeticiones con cada pierna. En todos estos ejercicios, es importante tener en cuenta que deben realizarse sin dolor (cierto grado de tensión es necesario, pero no deben de producir dolor). No obstante, si un ejercicio nos produce dolor, la solución no es dejar de realizarlo, lo debemos modificar, realizando el ejercicio sólo en el rango de movimiento que no produzca dolor. La supervisión de estos ejercicios, por un profesional de la fisioterapia, en caso de existir patología, o de las ciencias de la actividad física y el deporte, siempre es muy aconsejable, pues nos ayudarán a individualizar los ejercicios y a progresar, de forma adecuada, en la programación de las cargas.
Anquilosis
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Anquilosis

¿Qué es la anquilosis? La articulación es una estructura que permite la unión de dos huesos mediante una cápsula articular , ligamentos y cartílagos recubiertas por una membrana sinovial que los protege. Al existir cambios en esta estructura perdiendo su capacidad de protección, se pierde igualmente su capacidad de movilidad de forma parcial o total. A esta limitación funcional ocasionada por diferentes causas, entre las cuales resaltan los procesos traumáticos e inflamatorios, se le llama anquilosis. Tipos de anquilosis La anquilosis se puede clasificar según la región que se encuentre afectada: Columna vertebral Articulación temporomandibular  Rodillas Caderas De acuerdo a su evolución : Permanente: daño articular progresivo e irreversible. Transitoria: el daño se produce a nivel extraarticular y, de ahí, su potencial para ser reversible como la mucositis y tendinitis. De acuerdo a las estructuras comprometidas : Anquilosis ósea: fusión de dos huesos dentro de la articulación. Anquilosis fibrosis: inflamación de partes blandas de tejidos articulares. Síntomas de anquilosis Los principales síntomas de la anquilosis son: Pérdida de movilidad de la articulación comprometida de forma gradual y dolorosa: cuando la articulación queda inmovilizada completamente, desaparece la sensación de dolor y el paciente ve comprometida su movilidad. Inflamación: procesos intra articulares progresivos que destruyen la unión articular deformándola y se cree que es causa y consecuencia de la anquilosis. Dolor: depende del umbral del mismo de cada paciente. En promedio, conforme avanza la anquilosis, es más fuerte el dolor hasta que existe fusión completa y desaparece. Síntomas asociados: van a depender de la enfermedad que cause la anquilosis, entre los que podemos encontrar la presencia de fiebre, depresión, trastornos digestivos y cardiovasculares. Causas de anquilosis   Existen causas congénitas y causas adquiridas de anquilosis.  Congénitas: defectos fetales en la formación de las estructuras articulares, normalmente incapacitantes e imposibles de resolver quirúrgicamente. Traumatismos: debido a traumatismo directo o cuerpos extraños en la articulación no resueltos completamente que producen incapacidad. Inflamación: mecanismos inmunológicos que destruyen la articulación, afectando progresivamente su movilidad. Degeneración articular: desgaste por sobreuso de la articulación, ya sea por extra de peso o por la realización de movimientos repetitivos con mala higiene postural. Infecciones: infecciones intra articulares producen fibrosis secundaria de la articulación con pérdida de la movilidad y, en algunos casos, como la osteomielitis, destrucción del hueso. Tratamiento de anquilosis El tratamiento consiste en: Analgésicos antiinflamatorios no esteroideos que deben ser recetados por el médico para disminuir el dolor y la inflamación. Corticoides, biológicos y diacereina para la inflamación, según sea el caso. Fisioterapia con el objetivo de mejorar la movilidad articular. Cirugía en aquellos casos en los que otras intervenciones terapéuticas fallan y sirve para reparar estructuras dañadas. Se pueden realizar las siguientes pruebas complementarias : Radiografía de la articulación. Ecografía de partes blandas. Resonancia magnética de la articulación, técnica en demanda creciente actualmente, ya que, permite observar en detalle la articulación, así como los pequeños cambios y el tejido perilesional. Factores desencadenantes de anquilosis El principal factor desencadenante de la anquilosis es la presencia de una articulación previamente desgastada o lesionada , a la cual se le agrega un daño progresivo o una articulación con daño crónico que se le suma un daño agudo. Complicaciones de la anquilosis La anquilosis es una complicación ella misma, en la cual se pierde la movilidad absoluta de la articulación con la pérdida de la motilidad del área del cuerpo, disminuyendo drásticamente la calidad de vida del paciente . Por ejemplo, si se anquilosa la articulación de cadera, el paciente ya no puede levantarse de la cama y se ve condicionado a la aparición de escaras con el tiempo. Prevención de la anquilosis En la prevención de la anquilosis lo fundamental es el tratamiento farmacológico oportuno y la fisioterapia supervisada que deberá contar con terapia manual, electroterapia, ejercicios terapéuticos activos, que se puedan realizar en cabina o en piscina, ejercicios de reeducación postural y de movilidad y flexibilidad general. También existen unas pautas cotidianas como los baños de vapor, que ayudan a mejorar el dolor y la rigidez de la zona afectada. Preguntas frecuentes ¿Qué relación existe entre la anquilosis y la rigidez articular? La anquilosis no es lo mismo que la rigidez articular , ya que, esta última, suele estar asociada a enfermedades de tipo inflamatorio, temporal y no impide el movimiento. ¿ Qué ejercicios se recomienda realizar en caso de anquilosis Los ejercicios que se recomiendan son principalmente ejercicios de reeducación postural, movilidad articular y flexibilidad general.
Cifosis
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Cifosis

¿Qué es la cifosis? La cifosis es una deformidad exagerada de cualquiera de las curvaturas fisiológicas de la columna vertebral, en la cual, además, puede existir compresión nerviosa por la pérdida de alineamiento vertebral. Síntomas de la cifosis En el caso de la cifosis leve o moderada, no se suelen presentar síntomas notorios , sin embargo, se podría presentar:  Dolor en la espalda Rigidez de la espalda Deformidad en el área  En los casos severos de la cifosis , se pueden presentar los siguientes síntomas:  Apariencia redondeada de la espalda  Curvatura anormal de la columna  Dificultad para respirar  Dolor agudo en la espalda  Sensibilidad y rigidez en la columna  Fatiga Causas de la cifosis Existen múltiples causas de la cifosis, entre las cuales destacan: Osteoporosis: descalcificación ósea que debilita las vértebras haciéndolas más susceptibles de fracturas y deformidad. Degeneración discal: los discos son superficies suaves de amortiguación entre vértebras que pueden ir perdiendo consistencia o deshidratándose, lo que hace que las vértebras prácticamente se deformen y contacten entre sí.  Anomalías congénitas: no existe normal desarrollo vertebral produciéndose cifosis. Oncológicos: cáncer primario o metastático que debilita la vértebra, la fractura y origina compresión. Lesiones traumáticas directas. Deslizamiento de una vértebra adelante sobre otra, llamado espondilolistesis.  Tratamiento de la cifosis Si el arqueamiento de la espalda no parece que va a causar ningún problema, lo más probable es que no se necesite ningún tipo de tratamiento .  Se deberán hacer controles regulares hasta que se deje de crecer, para asegurar que la espalda se ha dejado de arquear. Cuando se detiene el proceso de crecimiento , la cifosis suele dejar de avanzar.  El médico especialista, tras la evaluación, indicará analgésicos si su síntoma principal es el dolor, también algún fármaco para tratar la enfermedad de base como los medicamentos para la osteoporosis. Otro tipo de tratamiento para la cifosis son las sesiones de fisioterapia y ejercicios de fortalecimiento de la espalda. Unos músculos fuertes ayudan a sostener mejor la columna.   En ocasiones, se indica la utilización de un corsé ortopédico para evitar que la cifosis empeore y sostener la espalda de la persona mientras atraviesa la etapa de crecimiento, pero, no se puede arreglar la cifosis de forma permanente.   En los casos más graves donde la cifosis causa dolor o problemas a la calidad de vida del paciente, se recomienda la cirugía de fusión vertebral, la cual consiste en introducir piezas óseas entre las vértebras y luego sujetarlas con barras y tornillos de metal hasta que la columna vertebral cicatrice en una posición corregida.  Pruebas complementarias usadas en casos de cifosis   Entre las pruebas utilizadas para el diagnóstico y tratamiento de la cifosis, se pueden incluir:  Examen físico completo: el cual consiste en flexionar el tronco hacia adelante. La cifosis es más fácil de detectar cuando la espalda se coloca de esta forma. Radiografías o tomografías: las cuales ayudan a determinar el grado de la curvatura y detectar deformidades en las vértebras. Prueba de densidad ósea: permite cuantificar la mineralización del hueso para emplear el tratamiento adecuado. Pruebas neurológicas: para comprobar los reflejos y la fuerza muscular. Factores desencadenantes de cifosis   Los factores desencadenantes de cifosis pueden ser: Osteoporosis: este trastorno adelgaza los huesos, lo que puede desencadenar la curvatura de la columna.  Anomalías congénitas: los huesos de la columna que no se desarrollan de la manera correcta antes del nacimiento pueden ocasionar cifosis. Fracturas: las fracturas por compresión de las vértebras pueden ocasionar la curvatura de la columna vertebral. Alteraciones en la postura vertebral por largos periodos. Complicaciones de la cifosis   La cifosis puede tener complicaciones como:  Problemas de respiración: la curvatura de la columna puede producir comprensión en los pulmones.  Problemas digestivos: la cifosis grave puede comprimir el sistema digestivo y causar problemas como el reflujo ácido y la dificultad para tragar. Baja autoestima o problema con la imagen corporal: esto suele suceder con mayor frecuencia en adolescentes.  Prevención de la cifosis No hay maneras de prevenir esta enfermedad . El diagnóstico y tratamiento adecuado de la osteoporosis puede evitar que se genere la cifosis. Así como el diagnóstico temprano de la cifosis puede evitar que la enfermedad empeore y la necesidad de una cirugía.  Preguntas Frecuentes   ¿Qué ejercicios se recomiendan para la cifosis?   Es importante acudir a un fisioterapeuta para que indique los ejercicios que mejor se adapten a la necesidad de cada paciente . Algunos ejercicios pueden incluir estiramiento de la musculatura anterior del pecho y estiramiento del pectoral.  ¿ En qué se diferencia la lordosis de la cifosis?  La lordosis es una curvatura que se presenta en cervicales y lumbares, mientras que la cifosis es una curvatura que se presenta en dorsales y sacro.  ¿ Qué zonas del cuerpo puede afectar la cifosis?  La cifosis afecta a la columna vertebral, produciendo dolor de espalda y rigidez de la columna . En ocasiones, puede afectar a los pulmones cuando se produce una compresión por la curvatura de la columna. Se puede producir también, una compresión en el sistema digestivo.
Espondiloartritis
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Espondiloartritis

¿Qué es la espondiloartritis? Las espondiloartritis o espondiloartropatías seronegativas son un grupo de enfermedades crónicas inflamatorias que afectan a distintas articulaciones y que comparten características en cuanto a síntomas, alteraciones en las pruebas de imagen y origen, con una predisposición genética definida. En algunas ocasiones, relacionada con expresión del antígeno HLA B- 27 (una proteína presente en los glóbulos blancos). Síntomas de espondiloartritis De manera general, se puede decir que las espondiloartritis producen afectación inflamatoria de varias articulaciones de forma asimétrica, sobre todo en las piernas y en la parte baja de la columna vertebral , siendo frecuentes los dolores en las nalgas o la columna lumbar que despiertan al paciente por la noche. A largo plazo, puede aparecer rigidez en las articulaciones afectadas con la disminución de su movilidad. Además, pueden estar acompañadas de otras manifestaciones en otros órganos del cuerpo como a nivel genitourinario, intestinal, ocular o en mucosas y piel. Pero, existen diferentes tipos de espondiloartritis con peculiaridades en cuanto a su manifestación sintomática, como son: La espondilitis anquilosante, con un claro predominio en su afectación de dolor en la columna, sobre todo, a nivel lumbosacro, pudiéndose asociar a manifestaciones extraarticulares en los ojos (uveítis), pulmonares (fibrosis), intestinales, etc. La artritis reactiva, con afectación inflamatoria de una o pocas articulaciones de forma asimétrica, especialmente en los miembros inferiores, y puede estar precedida de una infección previa (genitourinaria, gastrointestinal, …). También puede ir asociada a otras manifestaciones distintas a las articulaciones (conjuntivitis, úlceras orales, alteraciones de las uñas, etc.). La artritis psoriásica, que puede manifestarse con distintos patrones de presentación, afectación de múltiples articulaciones de forma simétrica (poliartritis), algunas articulaciones de forma asimétrica (oligoartritis), con inflamación solo de las articulaciones interfalángicas distales (dactilitis), o alteración de la columna inferior (espondilitis o sacroileítis). Esta forma de espondiloartritis está asociada frecuentemente a la manifestación cutánea previa de la psoriasis. Artritis en la enfermedad inflamatoria intestinal, que manifiesta hasta en un 20% de los casos alteraciones inflamatorias articulares en estos enfermos.  Causas de espondiloartritis La causa última de este tipo de enfermedades se desconoce, pero sí hay una relación estrecha con factores genéticos heredados (presencia del antígeno HLA B27 y de otros factores genéticos), así como la posible influencia de otros factores exógenos como algunas infecciones. Además, existe la presencia de una respuesta inflamatoria del sistema inmunológico específica. Tratamiento de la espondiloartritis El tratamiento clásico de las espondiloartropatías es mediante fármacos antiinflamatorios en los periodos de máxima actividad inflamatoria y de dolor. Como tratamiento de base de la enfermedad, cuyo fin de uso inicialmente se ha programado como fármacos que puedan modificar la evolución de la enfermedad, se utilizan fármacos inmunosupresores .  En los últimos años, se utilizan también los llamados fármacos biológicos , que bloquean la actividad de una proteína del sistema inmune (TNFα) directamente relacionada con la actividad inflamatoria que existe en la enfermedad.  Asociado siempre al tratamiento farmacológico debe ir el tratamiento rehabilitador con fisioterapia, para preservar la movilidad de las articulaciones en el mejor estado que la enfermedad permita. Pruebas complementarias realizadas en caso de espondiloartritis El diagnóstico de las espondiloartritis debe basarse en gran parte en el interrogatorio clínico y la exploración física detallada que realice el médico. También, este puede solicitar la realización de un análisis de sangre que ayude a determinar el diagnóstico, aunque no existe ninguna determinación específica que lo confirme (por ejemplo, presencia de antígeno HLA-B27, negatividad del Factor Reumatoide, elevación de los llamados reactantes de fase aguda como la VSG o la PCR, etc.) Dentro de las pruebas de imagen donde se pueden observar las alteraciones dentro de las estructuras de la articulación se realizan radiografías y resonancias magnéticas.  Factores desencadenantes de la espondiloartritis Son factores desencadenantes de la espondiloartritis : Antecedentes familiares de espondiloartritis. Padecimiento de enfermedades infecciosas bacterianas genitourinarias, digestivas, etc. Padecimiento de afecciones inflamatorias articulares no infecciosas. Padecimiento de enfermedades autoinmunes, como la psoriasis o la enfermedad inflamatoria intestinal. Complicaciones de la espondiloartritis Dependiendo de la evolución de la enfermedad, puede aparecer una deformidad progresiva de las articulaciones afectadas, limitación de su movilidad permanente y, con ello, de la capacidad funcional del paciente . En definitiva, la calidad de vida puede verse afectada a largo plazo, lo que puede ir asociado a la presencia de otras alteraciones a nivel psíquico como depresión, alteraciones del sueño, etc.  Prevención de la espondiloartritis La asociación genética del padecimiento de esta enfermedad no es posible prevenirla, si bien, se pueden disminuir los efectos que pueden tener el padecimiento de enfermedades infecciosas bacterianas con medidas generales de salud pública (lavado de manos, uso de preservativos en las relaciones sexuales, etc.). Una vez establecido el diagnóstico, los esfuerzos deben centrarse en evitar la deformidad de las articulaciones y la limitación del movimiento, manteniendo unas pautas de ejercicio y fisioterapia claras. Preguntas frecuentes ¿Qué es la espondiloartritis psoriásica? Se trata de una espondiloartropatía, una enfermedad autoinmune en la que se produce una artritis seronegativa, con afectación inflamatoria crónica y progresiva de las articulaciones que puede afectar a todas o algunas articulaciones, sobre todo, a nivel de los miembros superiores. Habitualmente, viene precedida de la afectación por psoriasis a nivel cutáneo durante algunos años previos. ¿Qué relación existe entre la espondiloartritis axial y la fibromialgia? Se trata de dos enfermedades reumatológicas crónicas cuya afectación a nivel de dolor y limitación funcional del paciente por el mismo puede ser el punto en común que comparten ambas enfermedades. ¿Padecer espondiloartritis puede ser causa de baja laboral? Sí, las limitaciones que puede producir la espondiloartritis por dolor e inmovilidad pueden requerir un periodo de reposo e incapacidad laboral para la recuperación y mejora del paciente . En ocasiones, la presencia de rigidez articular puede provocar una situación invalidante del paciente, limitando su actividad laboral o debiendo adaptar su desarrollo laboral a su situación evolutiva.
Diástasis
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Diástasis

¿Qué es la diástasis? La diástasis es la separación de dos músculos , la más frecuente es la de los rectos del abdomen, a consecuencia de alteraciones en el tejido conectivo asociado a aumento de volumen del abdomen. Los rectos anteriores se encuentran en la cara abdominal anterior y van desde las costillas hasta la parte superior del pubis, su función es mantener el cuerpo erguido, permitir la espiración, limitar la inspiración, proteger las vísceras y mantenerlas en posición, permitir la flexión del tronco e intervenir en parto, defecación, micción, risa, tos y estornudos. Síntomas de la diástasis En algunos pacientes, en etapas iniciales, suele ser asintomática, existiendo solo la deformidad a nivel de la línea alba abdominal. Otros pacientes, pueden presentar malestar en la espalda o en la zona lumbar , flatulencia, estreñimiento, sensación de hinchamiento después de las comidas, debilidad de suelo pélvico e incontinencia urinaria abdominal. Causas de la diástasis Entre las principales causas se encuentran: Sedentarismo Falta de tonicidad en la pared abdominal Cirugías que afecten a la pared abdominal Obesidad Mala gestión de las cargas que permite que aumente la presión intra abdominal Distensión abdominal por aumento de las vísceras abdominales o inflamación intestinal Tratamiento de la diástasis Existen varios tipos de tratamiento , dependiendo de la intensidad de la diástasis: Fisioterapia: realización de ejercicios de tonificación del músculo transverso del abdomen. Además, en ella nos aconsejarán evitar realizar abdominales tradicionales y las maniobras de valsalva. También pueden indicarnos gimnasia abdominal hipopresiva y el uso de fajas específicas para diástasis abdominal. Electroestimulación: no solamente funciona con los músculos de la pared abdominal, también es utilizada en los músculos del suelo pélvico. Mejorar el estreñimiento y todo aquello que aumente la presión intra abdominal. Cirugía: reservada para casos severos en los que los síntomas son múltiples y exista dolor al contraer la pared abdominal. Es importante continuar la fisioterapia antes y después de la operación para la correcta recuperación y evitar los factores desencadenantes para que no vuelva a suceder. El procedimiento es una abdominoplastia con reconstrucción de la pared abdominal y recolocación del ombligo. Pruebas complementarias realizadas en caso de diástasis El diagnóstico se puede realizar solamente mediante el examen físico realizado por un personal experimentado. Se le pide al paciente colocarse boca arriba con las rodillas flexionadas y los pies en el suelo y elevar ligeramente la cabeza haciendo un abdominal con la mano situada en el abdomen. En la posición de elevación se palpa con los dedos el límite entre ambos rectos del abdomen, si la misma es mayor a dos centímetros y medio se indica que existe diastasis de los rectos. También puede realizarse en algunos casos una ecografía de partes blandas de la pared abdominal de manera orientativa, que en ningún caso supera la valoración del médico. Factores desencadenantes de diástasis Existen varios factores de riesgo que pueden producir diástasis: Aumento de peso: el incrementos de peso corporal de predominio abdominal provoca un aumento de la presión intrabdominal alterando la línea alba. Embarazo: se debe a la distensión en los tejidos de la pared abdominal, además de cambios hormonales como el aumento de concentración de progesterona, elastina, estrógeno y relaxina, que alteran la composición del colágeno haciendo que se debiliten.  Embarazos múltiples, embarazos con feto de gran peso o en pacientes con debilidad previa de la pared abdominal. Parto: los partos complicados con muchas horas de trabajo generan un aumento de la presión intra abdominal pueden dar lugar a la separación de los rectos del abdomen. Ejercicio y aumento de presión intra abdominal: todo esfuerzo mantenido que eleve la presión intraabdominal como cargar objetos de peso o realizar ejercicios que provocan la separación de los rectos del abdomen puede causar esta patología. Complicaciones de la diástasis Las principales complicaciones son: Aparición de hernias Alteración de suelo pélvico Dolor lumbar Trastornos posturales Problemas digestivos como gases y estreñimiento Incontinencia urinaria Prevención de la diástasis La mejor prevención será la sugerida por un fisioterapeuta, quien nos indicará la realización de ejercicios hipopresivos aunque no tengamos diástasis, la corrección de la postura corporal, columna vertebral, miembros superiores e inferiores y suelo pélvico, y evitar los sobreesfuerzos, apneas y abdominales clásicos, son algunas de las recomendaciones para prevenir la diástasis . En el caso de embarazadas, se aconseja el uso de faja o cinturón abdominal para añadir soporte al abdomen. Preguntas frecuentes: ¿ Cómo se puede evitar la diástasis en el embarazo? Durante el embarazo ,se puede evitar la diástasis aplicando estos pequeños consejos: Uso de faja o cinturón abdominal para añadir soporte al abdomen. Evitar ejercicios abdominales. Realizar ejercicios sobre una pelota suiza que implica una extensión del cuerpo hacia atrás. Realizar ciertas posturas de yoga y ejercicios hipopresivos. No levantar o cargar objetos pesados. Evitar el estreñimiento, la tos crónica y, en general, todo aquello que aumente la presión intra abdominal. No aumentar exageradamente de peso durante el embarazo. ¿ Cómo se relacionan la diástasis y los problemas digestivos? Al ser los músculos los que sostienen los órganos internos y estabilizar la zona central de nuestro cuerpo, disminuir su tonicidad, trae como consecuencia alteraciones en la carga intra abdominal y reorganización, por lo cual, acarrea trastornos digestivos como dolor abdominal, flatulencia y mala digestión. ¿ Puede la diástasis generar una hernia? Sí, las diastasis severas de la pared abdominal pueden originar hernias de la pared abdominal o umbilical por herniación de las vísceras ante una pared abdominal muy debilitada.
Enfermedad de Paget
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Enfermedad de Paget

¿Qué es la enfermedad de Paget? La enfermedad de Paget u osteítis deformante es una enfermedad inflamatoria del tejido óseo metabólico, que cursa con descomposición anormal de este y con un debilitamiento excesivo de los huesos a la que se asocian deformidades que se producen de forma desordenada. Afecta a una o varias zonas del esqueleto del cuerpo, siendo los más frecuentes los huesos de brazos, piernas, clavícula, pelvis, columna y cráneo. Síntomas de la enfermedad de Paget Los principales síntomas de la enfermedad de Paget son: En algunos casos, la enfermedad cursa con síntomas dolorosos muy leves y el diagnóstico se realiza al momento de realizar un estudio radiológico por alguna fractura en donde se observan huesos más grandes de lo habitual con degeneración del cartílago de las articulaciones. La remodelación rápida del hueso los hace más débiles, por lo cual, son más propensos a deformidades y fracturas. En la analítica, existe un aumento desproporcionado de la fosfatasa alcalina. Al ser los síntomas predominantemente en las piernas, estas pueden arquearse y los huesos alargados y deformados de las piernas pueden agregar presión adicional en las articulaciones cercanas, lo que termina provocando artrosis. En la columna vertebral puede aparecer aplastamiento de las raíces nerviosas con el consecuente dolor u hormigueo de la zona, además del característico encorvamiento. Si es en  el cráneo, las excrecencias pueden originar pérdida de la audición, vértigo, pérdida de visión o dolores de cabeza. Otros síntomas pueden observarse por la redistribución del flujo que supone la dilatación de los vasos sanguíneos y el aumento de la circulación sanguínea ósea, produciendo aumento del gasto cardiaco, cardiomegalia y precipitando una insuficiencia cardiaca. Causas de la enfermedad de Paget No existe hasta ahora una causa conocida para la enfermedad de Paget. Algunos científicos se inclinan por la teoría de que la misma puede estar producida por un virus como el paramixovirus , sarampión o virus del moquillo de perro, ya que se han encontrado en el interior  de los osteoclastos de personas afectadas. Otras teorías se inclinan hacia la conjunción de factores ambientales y genéticos con un patrón hereditario consistente en una transmisión autosómica dominante . Tratamiento de la enfermedad de Paget No existe un tratamiento curativo , por lo que los esfuerzos van encaminados a aliviar el dolor y minimizar las complicaciones: Los antiinflamatorios no esteroideos, paracetamol o los inhibidores de la COX2 son útiles para aliviar el dolor de leve a moderada intensidad. Los pacientes con dolores graves de cadera o rodilla son candidatos a reemplazos articulares. Las manifestaciones que dependen directamente del remodelado anómalo, como hipercalciuria, hipercalcemia e insuficiencia cardiaca, responden de manera satisfactoria al tratamiento con inhibidores de la resorción. El uso de los bifosfonatos como pamidronato, zolendronato, alendronato y risendronato, suprime la reabsorción ósea y ofrece mejoría en cuanto al dolor aunque no previenen complicaciones a largo plazo ni modifica la evolución de la enfermedad. Uso de suplementos de calcio y vitamina D en aquellos pacientes en tratamiento con bifosfonatos. Calcitonina: se reserva para aquellos pacientes que no pueden utilizar bifosfonatos, inhiben la actividad del hueso afectado, reduce los síntomas y previene la aparición radiológica de las lesiones. Disminuye el dolor debido al mecanismo analgésico central. Cirugía: se realiza en casos de fracturas severas, reemplazos articulares, realineación de huesos deformados y reducción de presión sobre los nervios. Son cirugías complicadas debido al riesgo de sangrado propio de esta enfermedad. Pruebas complementarias realizadas en caso de enfermedad de Paget El diagnóstico se realiza a través de los siguientes pruebas : Radiografía simple: donde se aprecian las lesiones características con afectación de al menos un hueso. Tomografía axial computarizada: útil para diagnósticos de estenosis del canal vertebral, afectación craneal o complicaciones neurológicas. Elevación de los valores plasmáticos de fosfatasa alcalina. Gammagrafía ósea: para conocer la extensión del proceso y para el estudio de complicaciones neurológicas por afectación de huesos de la base del cráneo, columna vertebral o huesos largos. Es mucho más sensible que la radiografía para identificar los huesos afectados. Factores desencadenantes de enfermedad de Paget Los factores que pueden aumentar el riesgo de padecer esta enfermedad son: Edad: mayores de 40 años. Sexo: hombres con mayor probabilidad que mujeres. Gentilicio: más frecuente en Inglaterra, Escocia, Europa Central y Grecia, poco frecuente en Escandinavia y Asia. Antecedentes familiares: la presencia de la enfermedad en la familia predispone para padecerla. Complicaciones de la enfermedad de Paget Las principales complicaciones son: Fracturas y deformidades óseas que afectan la capacidad de caminar y que son susceptibles de reparar quirúrgicamente. Artrosis de las articulaciones cercanas. Alteraciones neurológicas por compresión nerviosa causando dolor, debilidad, hormigueo, pérdida de audición o visión. Insuficiencia cardiaca por el excesivo esfuerzo del corazón para bombear sangre a las zonas más afectadas del cuerpo. Cáncer de huesos, que afecta al 1% de las personas que padecen esta enfermedad. Prevención de la enfermedad de Paget Al no conocer las causas y origen de la enfermedad, es imposible tomar medidas preventivas de esta enfermedad . Con el tratamiento, lo que se pretende, es prevenir las complicaciones. Preguntas frecuentes ¿ Se puede prevenir la enfermedad de Paget? La enfermedad de Paget no es una enfermedad prevenible , ya que no se conocen a ciencia cierta sus causas, más allá de mantener una salud ósea realizando dieta, ejercicio y no fumando. Por tanto, no existe una medida específica que la prevenga. ¿ Qué ejercicios se recomiendan para la enfermedad de Paget ? Ejercicios físicos de baja intensidad como caminar, nadar y bicicleta son aconsejables siempre y cuando el paciente no sienta dolor durante su realización. Los ejercicios de estiramiento aumentan la flexibilidad de las articulaciones y ayudan a mejorar el dolor. ¿Se recomienda la fisioterapia para la enfermedad de Paget? La fisioterapia ayuda a mejorar el dolor, así como los masajes. El tratamiento rehabilitador consiste en diferentes técnicas que ayudan a aliviar los síntomas y evitar las complicaciones, como las movilizaciones activas y pasivas, estiramientos, inducción miofascial y la reeducación postural global. Por último, también se emplean técnicas de yoga, reiki, Pilates, taichí, ozonoterapia y acupuntura con buenos resultados.
Artrogriposis
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Artrogriposis

¿Qué es la artrogriposis? La artrogriposis es un síntoma que forma parte de diferentes síndromes congénitos en los cuales se produce la contracción de una o varias articulaciones con diferente afectación. La contracción da lugar a la imposibilidad de mover una determinada articulación. La artrogriposis se considera dentro de las enfermedades raras, se produce como mucho en uno de cada 10.000 nacimientos. Tipos de artrogriposis La artrogriposis distal y la artrogriposis múltiple congénita son las dos divisiones principales, pero, en cada una de ellas hay diferentes tipos; en la distal, según la zona afectada, hay hasta 10 tipos diferentes y la congénita múltiple puede cursar con escoliosis, con displasia grave de ectodérmica, con alteraciones pulmonares y renales, etc. Existen hasta 400 síndromes que asocian artrogriposis con otras alteraciones a nivel neurológico u orgánico múltiple. Síntomas de artrogriposis El síntoma principal de la artrogriposis es la contracción de una o varias articulaciones distales antes del nacimiento. La articulación queda doblada, no recta, presentado dificultades para su movilidad . La contracción de la articulación lleva asociada la atrofia muscular de determinados músculos por la falta de movilidad, con contractura muscular asociada  y pérdida de la funcionalidad articular. Puede asociar otros síntomas como la rotación interna de los hombros, la falta de extensión de los codos, contracturas en flexión de las muñecas y los dedos, las caderas pueden estar rotadas o dislocadas y los tobillos y pies en rotación interna. En la tipo distal puede aparecer alteración de la visión , lengua fisurada, cuello corto o talla baja. Durante el embarazo , los movimientos fetales suelen estar disminuidos. Causas de artrogriposis La causa de la artrogriposis es desconocida, aunque es congénita, no parece hereditaria, pero, está ligada a alteraciones en algunos genes. Hay una artrogriposis múltiple en Israel que se presenta de forma hereditaria en forma autosómica recesiva. Otros síndromes que presentan entre sus síntomas la artrogriposis son síndromes genéticos, ligados al cromosoma X, o bien, genes autosómicos recesivos.  Tratamiento de artrogriposis El tratamiento de la artrogriposis múltiple es multidisciplinar, estando involucrados traumatólogos , fisioterapeutas , psicólogos, neurólogos, pediatras y terapeutas ocupacionales.   La familia de estos niños necesita un gran apoyo, tanto en la forma de tratar al niño, como un posible apoyo psicológico que les permita evolucionar con el mismo. Al tener varias articulaciones afectadas y una atrofia muscular consecuente, es necesario valorar las articulaciones en conjunto y no cada una de forma individual mediante un tratamiento integral , donde la fisioterapia debe ser lo más temprana posible. Cuando se realiza cirugía, esta se debe hacer entre los tres y los trece meses, ya que esto da mejores resultados en la funcionalidad de las articulaciones del niño. En los miembros superiores, lo que más se suele operar son los dedos , seguidos de muñeca, codo y hombro. En el pie , puede ser necesario realizar un alargamiento del tendón de Aquiles o un proceso de realineación del calcáneo, situandolo en su sitio. Las contracturas de la rodilla se tratan de forma conservadora, siendo en ocasiones necesario alargar los músculos isquiotibiales con capsulotomía de la articulación. Las prótesis pueden ser necesarias, mejorando los resultados de la cirugía al mantener la articulación alineada. El tratamiento fisioterápico se hace con movilizaciones suaves, estiramientos ligeros y potenciando la musculatura antagonista a la deformidad. Pruebas complementarias realizadas en caso de artrogriposis Las principales pruebas complementarias de la artrogriposis son las pruebas de imagen como radiografías, resonancias magnéticas o TAC, que permitan conocer el alcance de las lesiones y planear de forma adecuada la fisioterapia y la cirugía si fuera necesaria. Otras pruebas frecuentes son. la biopsia muscular permite conocer el grado de atrofia muscular. los estudios electrofisiólogos permiten conocer la conducción nerviosa. las pruebas genéticas permiten conocer la existencia de una artrogriposis genética. y, el diagnóstico durante el embarazo, se realiza por medio de ecografías. Factores desencadenantes de artrogriposis El factor desencadenante de la artrogriposis es la falta de movilidad del feto en el útero, que está en relación con factores ambientales , genéticos y, en muchos casos, idiopático (no se conoce la causa que lo produce). También se consideran factores desencadenantes el consumo de tóxicos y drogas por la madre durante el embarazo. Complicaciones de la artrogriposis Las complicaciones de la artrogriposis son escoliosis a nivel de la columna vertebral , hipoplasia pulmonar (falta de desarrollo de los pulmones), alteraciones a nivel facial con hipoplasia del mentón, hernias abdominales, hemangioma facial, problemas respiratorios y falta de crecimiento. Prevención de artrogriposis La artrogriposis es una enfermedad congénita que aparece en el momento del nacimiento, no se sabe bien su causa, más que en los casos genéticos en que uno o los dos padres pueden ser genéticamente portadores de enfermedad. Esto se conoce por análisis genéticos en familias con antecedentes si bien muchos de los casos son de novo, esto es, no hay alteración genética previa y, por tanto, no se pueden prevenir al desconocer la causa de los mismos. Para prevenirla, no se deben consumir drogas ni tóxicos durante el embarazo. Preguntas frecuentes ¿Cómo se hace el diagnóstico de artrogriposis? El diagnóstico de artrogriposis es un diagnóstico clínico. Si bien, las ecografías durante el embarazo pueden visualizar alteraciones en las articulaciones del niño, es cuando nace, por el aspecto que este presenta, que se llega al diagnóstico. Se pueden realizar estudios genéticos durante el embarazo o tras el parto para conocer si la causa es genética. Esto permitirá dar un consejo genético a los padres para futuros embarazos. ¿Qué es la artrogriposis múltiple congénita? La artrogriposis múltiple congénita es la enfermedad en la cual aparecen múltiples artrogriposis en las articulaciones, se llama congénita por que aparece en el momento del nacimiento, pudiendo ser diagnosticada previamente al embarazo mediante el uso de ecografías; es una situación no progresiva, es decir que no avanza con la edad, dando lugar a una contractura articular que limita los movimientos articulares. En la mayoría de las ocasiones no es de origen genético y no se produce más que una vez en una familia, forma parte de las conocidas como enfermedades raras. ¿Puede la artrogriposis aparecer en bebés? La artrogriposis es una enfermedad congénita, esto quiere decir que está presente desde la etapa intrauterina en el desarrollo del feto , por tanto, es una enfermedad que aparece en el niño en el momento del nacimiento. Se relaciona con la falta de movilidad en el útero materno, ya sea por falta de líquido amniótico, por alteración nivel de útero o por causas inherentes al feto. Es una enfermedad que no progresa a lo largo de la vida, pero que sí supone una limitación en la misma. Algunas de sus formas más complejas pueden suponer una mortalidad precoz del individuo.
Codo de tenista
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Codo de tenista

¿Qué es el codo de tenista? El codo de tenista, también llamado epicondilitis lateral , es la inflamación y, en algunos casos, ruptura de los tendones que unen el músculo del antebrazo a la protuberancia ósea en el exterior del codo, debido a una sobrecarga por movimientos repetitivos de muñeca y brazo. Síntomas del codo de tenista El síntoma principal es el dolor, que varía en intensidad y se reproduce al palpar la parte lateral del codo, al estirar los músculos extensores de la muñeca y los dedos y al oponerse a su contracción , así como al realizar movimientos de agarre con la mano. Este dolor puede intensificarse no permitiendo la movilidad del brazo. Causas del codo de tenista La principal causa de la epicondilitis es el uso excesivo y sobrecarga por contracción excesiva de los músculos del antebrazo que se utilizan para extender y elevar la mano y la muñeca. La realización de movimientos repetitivos con el esfuerzo ejercido en los tejidos conlleva una serie de desgarros en los tendones que anclan el músculo al hueso. Tratamiento del codo de tenista El tratamiento del codo de tenista es el siguiente: Medidas térmicas: colocación de hielo o frío local alternando con calor. Reposo de la articulación: el médico puede indicar algún brazalete de apoyo que ayuda a descargar los tendones afectados. Analgésicos antiinflamatorios: solo pueden ser indicados por el médico tras la evaluación física. Rehabilitación: indicada por el médico y realizada por fisioterapeutas, basada en ejercicios de estiramiento, así como en adoptar cambios posturales para evitar que vuelva a suceder. Infiltraciones con corticoesteroides: pueden realizarse guiadas por ecografía para mayor precisión. Infiltraciones con plasma rico en plaquetas o ácido hialurónico: tratamientos realizados actualmente con alto índice de éxito. Cirugía: existe un pequeño número de casos que no mejoran con estos tratamientos y deben resolverse mediante intervención quirúrgica, eliminando el tejido del tendón dañado y volviendo a unir el tejido del tendón normal con el hueso. Pruebas complementarias realizadas Aunque el diagnóstico se realiza principalmente mediante un examen físico al paciente, el médico, con el fin de descartar otras enfermedades, puede solicitar alguna prueba radiológica o resonancia magnética del brazo. Factores desencadenantes de codo de tenista El principal factor desencadenante en el codo de tenista es la realización de movimientos repetitivos con sobre exposición de la articulación como ocurre en pintores, carniceros, carpinteros, músicos, peluqueros, manicuristas y dentistas sin la debida medida de higiene postural. También, realizar algunas actividades físicas como el golf, esgrima y deportes de raqueta. En menor porcentaje la lesión puede ser causada por un traumatismo directo sin sobreuso de la articulación. Complicaciones del codo de tenista La principal complicación del codo de tenista es el dolor crónico con limitación funcional del brazo, lo que limitará al paciente a realizar labores cotidianas . Prevención del codo de tenista Con el fin de evitar este tipo de lesión, es importante mantener una correcta higiene postural a la hora de trabajar, realizando pausas significativas, así como dominar las técnicas deportivas . Antes de la realización de cualquier actividad que involucre movimientos repetitivos de esa articulación, se debe calentar la musculatura extensora del antebrazo y el codo y, posteriormente, realizar ejercicios de estiramiento de la musculatura para evitar lesiones tendinosas. Preguntas frecuentes ¿Qué medicamentos se recomiendan para el codo de tenista? Los medicamentos que se recomiendan son los analgésicos antiinflamatorios no esteroideos , mejor conocidos como AINES, pero, estos deben ser indicados por el médico especialista. También se indican inyecciones de corticoides cuando los analgésicos vía oral no consiguen mejorar el dolor. ¿Qué ejercicios o estiramientos se recomiendan para el codo de tenista? Se pueden realizar estiramientos de la musculatura extensora del antebrazo para relajar el músculo y traccionar menos del tendón. Este estiramiento se realiza con extensión completa del codo flexionando la muñeca con la ayuda de la otra mano. El automasaje al músculo puede relajarlo y quitarle carga al tendón . Para realizarlo:  colocar el antebrazo sobre la mesa con la palma de la mano mirando hacia el suelo y realizaremos pases longitudinales desde la muñeca hacia el codo sobre la musculatura afectada, ejerciendo ligera presión sin llegar a producir dolor. realizar ejercicios excéntricos de la musculatura extensora del antebrazo, colocando el antebrazo apoyado sobre la mesa con la muñeca y la mano fuera de ella. Luego cogemos en la mano una pesa o cualquier objeto con peso promedio de 1 a 2 kilogramos y, con la ayuda de la otra mano, lo subimos hacia arriba con la muñeca sin mover el antebrazo, de forma que los extensores del antebrazo no hagan fuerza. Posteriormente bajamos de forma progresiva. ¿Qué relación existe entre el codo de tenista y la fibromialgia? Aunque no existe una relación causal, encontramos que uno de los puntos dolorosos diagnósticos de fibromialgia se encuentra justamente en el área donde se produce el llamado codo de tenista, por lo cual, su aparición sin motivo aparente no relacionado con movimientos repetitivos y que además converge con otros puntos dolorosos alrededor del cuerpo , puede hacer sospechar de una fibromialgia.
Epifisiolisis
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Epifisiolisis

¿Qué es la epifisiolisis? La epifisiolisis es una fractura que afecta al cartílago de crecimiento , por ello, solo se da en niños. Supone hasta el 25 % de las fracturas que se dan en niños, es más común en varones y más frecuente en el miembro superior, afectando sobre todo al radio. Cuando afecta al miembro inferior suele hacerlo también a la parte inferior de la tibia. ¿Tienes dudas?  Regístrate ahora  en Savia y habla gratis con nuestros especialistas médicos por chat o videoconsulta. Síntomas de epifisiolisis Los síntomas más frecuentes en la epifisiolisis son: Dolor, que puede ser espontáneo o, por el contrario, solo aparece cuando se presiona sobre la zona afectada. Impotencia funcional, dolor al apoyar peso o al mover la zona afectada. Calor o inflamación en la zona del hueso distal cercano a una articulación. Causas de epifisiolisis Las causas de una epifisiolisis son los golpes o caídas que se pueden dar en accidentes automovilísticos, en caídas por escaleras, de bicicletas, monopatines, etc., jugando al fútbol, baloncesto y otros deportes de contacto. También hay que tener en cuenta que puede ser muestra de un maltrato infantil. Tratamiento de epifisiolisis   El tratamiento de la epifisiolisis es la inmovilización de la zona afectada. En muchas ocasiones, la colocación de una férula o una escayola es suficiente para permitir al cartílago recuperarse. En otras ocasiones, dado que el cartílago está mal alineado , es necesaria la cirugía, permitiendo restituir el cartílago e inmovilizar la zona, mejorando la evolución del proceso. Es habitual que estas lesiones sean seguidas durante un largo periodo de tiempo para vigilar que el cartílago se recupera totalmente y no da lugar a deformidades en el hueso afectado. ¿Tienes dudas?  Regístrate ahora  en Savia y habla gratis con nuestros especialistas médicos por chat o videoconsulta. Pruebas complementarias realizadas en caso de epifisiolisis Las pruebas complementarias para llegar al diagnóstico de una epifisiolisis es la prueba de imagen. En primer lugar, se realizan pruebas radiográficas simples, que no siempre permiten saber si se afectó el cartílago o no, puede inmovilizarse miembro y posteriormente realizar nuevas radiologías de control para ver su evolución. En otros casos, es necesario el uso de Resonancia Magnética Nuclear , un TAC o una ecografía que permiten visualizar los tejidos blandos y, de esta manera, valorar mejor el posible daño del cartílago. Factores desencadenantes de epifisiolisis Los factores desencadenantes de la epifisiolisis son las causas de los golpes en los niños. Es más frecuente en varones que en las mujeres, dado que estas presentan una maduración más temprana de las zonas cartilaginosas de crecimiento y esto disminuye el posible daño. Complicaciones de la epifisiolisis La complicación de la afectación del cartílago de crecimiento es la deformidad o falta de crecimiento del hueso, quedando la extremidad torcida o más corta que la contralateral. Las alteraciones de crecimiento son más frecuentes cuando la zona afectada es muy grande o cuando atañe la zona de la articulación de la rodilla. En los casos de afectación de hombro o muñeca rara vez se producen deformidades. Las alteraciones son más habituales cuando las lesiones se producen en niños más pequeños, porque tienen un mayor periodo de crecimiento. Prevención de epifisiolisis La prevención de la epifisiolisis está relacionada con la prevención de los accidentes y las caídas . Es recomendable que los niños lleven protecciones adecuadas para el deporte que realicen y que se encuentren con supervisión al practicarlo.  Preguntas frecuentes ¿Se necesita rehabilitación tras una epifisiolisis? En general, después de un epifisiolisis, no es necesaria la rehabilitación. Los niños, tras retirarles el yeso o la férula, tienden a mover de forma espontánea la zona afectada, no precisando una rehabilitación específica para recuperarse. Cuando la zona afectada es la cabeza del fémur y se somete a cirugía, puede ser necesario con posterioridad una rehabilitación , por el periodo de inmovilidad al que se somete a la articulación, impidiendo el apoyo de la misma hasta 4 o 6 meses. ¿Puede ayudar la fisioterapia en caso de epifisiolisis? La fisioterapia puede ayudar en los casos de epífisis de la extremidad inferior, pero, es tras la cirugía o la inmovilización cuando ayuda a recuperar la movilidad articular, no para el tratamiento de la lesión como tal. Los periodos de inmovilización largos del miembro inferior o cuando se somete a cirugía una rodilla, puede ser necesaria una fisioterapia para recuperar de forma eficaz la movilidad de la misma, lo mismo ocurre en los casos de cirugía de la cabeza del fémur. En los miembros superiores donde la inmovilización es más corta no suele ser necesaria. ¿Cuánto tiempo tarda en curarse una epifisiolisis? Las epifisiolisis tienen diferentes tiempos de curación según el grado que presentan.  Los grados I y II , que no se someten a cirugía, suelen tener una inmovilización de unas 4 semanas.  Los grados III y IV , que son más graves y precisan cirugía, el tiempo de afectación suele ser más largo. En los casos de cirugía sobre la epifisiolisis de la cabeza femoral puede durar hasta 6 meses para conseguir una recuperación completa. ¿Tienes dudas?  Regístrate ahora  en Savia y habla gratis con nuestros especialistas médicos por chat o videoconsulta.
Hombro congelado
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Hombro congelado

¿Qué es el hombro congelado? Se llama hombro congelado a la afectación de la articulación del hombro a nivel de la cápsula, produciéndose una inflamación y retracción de los ligamentos de esta articulación que impide la movilidad del mismo. Suele acompañarse de un dolor intenso y la pérdida de movilidad es muy importante. También se conoce con el nombre de capsulitis retráctil. Síntomas de hombro congelado Los síntomas van variando a lo largo del proceso, en un principio se produce una inflamación acompañada de dolor muy intenso. Posteriormente, se produce una inmovilidad y rigidez articular muy importante y, al cabo de unos meses, este dolor va descendiendo recobrando la movilidad. El dolor suele ser máximo por la noche . La recuperación del proceso se da en unos 18 meses.  Causas de hombro congelado Las causas del hombro congelado no son bien conocidas, aunque parece relacionado con movimientos que producen una sobrecarga en el hombro, puede ser por movimientos repetitivos . Se ha observado que se produce con mayor frecuencia en mujeres y, dentro de este grupo, es más frecuente en mujeres que presentan diabetes o alteraciones del tiroides. Tras el periodo de dolor es cuando se produce la rigidez de la articulación. Tratamiento de hombro congelado El tratamiento del hombro congelado es diferente dependiendo del momento en que se encuentre la enfermedad. Enfermedad inicial: en esta fase predomina el dolor. Es importante disminuir el mismo evitando aquellos movimientos que producen el dolor, puede ser necesario el uso de analgésicos y antiinflamatorios. En algunos casos puede ser beneficioso la inyección de un corticoide intrarticular, que evita la inflamación y mejora la dolencia. Es necesario realizar ejercicios de estiramiento capsular suaves al menos 5 veces al día. Enfermedad avanzada: en esta fase el dolor está menos presente y predomina la capsulitis. Es necesario realizar ejercicios de estiramiento de la cápsula y se debe realizar un tratamiento rehabilitador en un centro especializado. La fisioterapia debe evitar el aumento del dolor del hombro. En casos en que pese a ello no se logra una movilidad correcta del hombro, puede requerir realizar una movilización bajo anestesia . En ocasiones, requiere realizar una artroscopia para examinar la articulación y valorar otras posibles lesiones. Tras ello, es necesario continuar con los movimientos de estiramiento . Cuando sea oportuno, se pueden inyectar anestésicos en la articulación para evitar el dolor al realizar los ejercicios. Pruebas complementarias realizadas en caso de hombro congelado El diagnóstico del hombro congelado se basa en una historia clínica completa y una exploración del hombro. Las pruebas de imagen complementarias pueden ayudar para descartar otras alteraciones que pueden dañar al hombro, pero no ayudan al diagnóstico del hombro congelado. Son pruebas a realizar, si hubiera duda de daños en los tendones, las ecografías. Si hay sospecha de daño sobre cartílagos, el uso de resonancia magnética o TAC puede ser necesario. Factores desencadenantes de hombro congelado El factor desencadenante del hombro congelado es un movimiento repetitivo con esta articulación y que produce dolor. También se considera factor predisponente el ser mujer y sufrir de diabetes y personas con problemas tiroideos mal controlados.  Complicaciones del hombro congelado Las complicaciones del hombro congelado son escasas, es un proceso benigno, ya que en muchas ocasiones tiende a la curación en un periodo que varía entre los 18 y los 26 meses . Cuando esto no ocurre y el hombro se mantiene rígido más de este periodo, es necesario proceder a la movilización quirúrgica. Prevención del hombro congelado La prevención del hombro congelado empieza por el control de enfermedades como la diabetes y los problemas tiroideos que favorecen la patología, un buen control de las mismas disminuye la probabilidad de tener un hombro doloroso. Para evitar la aparición de la enfermedad , se deben tratar de forma precoz los dolores del hombro, mediante tratamiento antiinflamatorio, infiltraciones y fisioterapia, con el fin de realizar estiramientos de la cápsula. Preguntas frecuentes: ¿Cuál es el tiempo de recuperación del hombro congelado? El tiempo de recuperación del hombro congelado de forma espontánea varía entre 18 y 26 meses, siendo raro que se prolongue más allá de este tiempo. Cuando se hace un tratamiento precoz del proceso , el tiempo de duración se puede acortar hasta 4 o 6 meses. ¿Qué ejercicios se recomienda realizar en caso de hombro congelado? Los ejercicios del hombro congelado son los que favorecen la movilidad del hombro, estos pueden ser pasivos o activos.  Entendemos por ejercicios pasivos los que se realizan con una movilidad del brazo sano para forzar movilidad el dañado, estos ejercicios deben realizarse con cuidado para intentar no aumentar el dolor . Entre los ejercicios activos se encuentra el péndulo; debemos dejar caer el hombro por su peso y realizaremos movimientos giratorios tanto en un sentido como el otro, y movimientos de delante a atrás, sin forzar la articulación . También, los movimientos de elevación colocando el brazo afectado sobre una pared y tratando de movilizar el brazo subiendo y arrastrando la mano sobre la pared. Y tratar de cerrar las escápulas con los brazos a la altura del pecho doblados.  Entre los ejercicios pasivos se encuentran; con el brazo afecto extendido tratar estirar la zona de hombro con el brazo sano, tanto tirando de la zona del brazo como del hombro. También, situar el brazo afectado por detrás de la cabeza y empujar con el brazo sano hacia abajo para estirar la zona del hombro . Estos ejercicios se deben realizar sin producir dolor intenso en el hombro, ya que el dolor puede empeorar el proceso .
Gonalgia
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Gonalgia

Actualizado el 04/07/2022 Las complejas características anatómicas de la rodilla determinan que se trate de una articulación frecuentemente afectada por traumatismos, así como por procesos inflamatorios y degenerativos. El dolor es un síntoma también frecuente en la rodilla. ¿Qué es la gonalgia? La gonalgia es un término general que hace referencia a la aparición de dolor en la rodilla. Este puede estar causado por múltiples factores, incluyendo los de naturaleza traumática. Afecta a un 20-25% aproximadamente de la población adulta y su prevalencia ha aumentado un 65% en los últimos 20 años. No en vano, la rodilla es una de las estructuras del aparato locomotor más complejas, debido a la cantidad de estructuras que la componen. Juega una importancia primordial en la estabilidad y el desplazamiento, viéndose sometida a fuertes cargas y rápidos cambios de dirección. La gonalgia puede aparecer junto a otros síntomas y signos: Inflamación y Enrojecimiento y aumento de la temperatura al Sonidos de chasquidos, crujidos o sensación de Incapacidad de realizar determinados movimientos con la articulación. Las causas de la gonalgia se podrían dividir en dos grandes grupos: Origen traumático . El traumatismo directo, la torsión excesiva de rodilla con pie fijo en suelo o la caída con golpe sobre las rodillas pueden producir desde una simple contusión, pasando por una lesión de ligamentos y meniscos, hasta una lesión ósea o procesos de recuperación tras una cirugía. Origen no traumático . El dolor en la rodilla puede deberse a enfermedades como los procesos degenerativos, reumáticos o infecciosos. Entre ellos destacan la artrosis , artritis reumatoide (se produce destrucción de la articulación debido a mecanismos autoinmunes), gota o acumulación de cristales de ácido úrico y pseudogota por cristales de calcio, y artritis séptica por infección directa del espacio articular. Posibles causas de gonalgia La gonalgia puede ir asociada a una gran variedad de lesiones de rodilla afectando a cualquiera de los tejidos que forman parte de ella, incluyendo ligamentos, tendones o bolsas sinoviales de la articulación. Es por ello que una parte fundamental del proceso será realizar un diagnóstico diferencial exhaustivo. Dentro de estas lesiones las más habituales en consulta suelen ser: Artrosis . Su existencia suele estar relacionada con la edad, aunque existen muchos otros factores. Es más común en adultos de entre 70 y 74 años. Los síntomas principales son el dolor que puede empeorar con el inicio de la marcha y la limitación del rango articular de la rodilla. Se trata de una patología de evolución Procesos inflamatorios articulares . El signo característico es la tumefacción (inflamación). El examen físico puede mostrar si el proceso inflamatorio es extra o intraarticular. Bursitis . Se trata de lesiones localizadas bien delimitadas en el caso de la Pueden aparecer en la zona anterior de la rodilla (bursitis pre rotuliana) o en la zona lateral (bursitis anserina). Tenidopatía rotuliana . Un exceso de cargas repetitivas sobre el aparto extensor de la rodilla puede llegar a producir la aparición de los síntomas, que generalmente suele ser dolor en la cara anterior de la Síndrome patelofemoral . Se trata de la principal causa de dolor en la cara anterior de la rodilla entre adolescentes y adultos menores de 60 años. Su causa es multifactorial y será fundamental realizar un buen examen y exploración. Alteración intraarticular y ligamentosa . Suele acompañarse de antecedentes traumáticos y rotura de los ligamentos o meniscos de la rodilla. Esto origina derrame articular y sensación de inestabilidad, bloqueo de rodilla en semiflexión o incapacidad funcional. Tratamiento de la gonalgia El tratamiento de la gonalgia variará en función de su causa. Fisioterapia Las diferentes técnicas y herramientas de fisioterapia, así como una correcta administración y dosis de diferentes tipos de ejercicio y contracciones musculares en función de la patología, irán encaminadas en la reducción del dolor y en la rehabilitación de la lesión si fuera posible. Tratamiento farmacológico Tratamientos específicos . Medicamentos indicados propiamente para enfermedades como la gota o artritis reumatoide. AINES . El uso y utilidad de los antiinflamatorios no esteroideos se limita a las fases agudas. Inyecciones articulares . Puede incluir la inyección en la rodilla de corticoides, ácido hialurónico o plasma rico en plaquetas para reducir la inflamación y el dolor. También pueden mejorar la movilidad y favorecer la cicatrización. Cirugía En algunos casos, la cirugía es el único método para reparar el problema articular. Puede realizarse a través de artroscopia, con pequeñas incisiones, para reparar cartílago y ligamento. También puede realizarse cirugía abierta en el caso de reemplazo de rodilla. Otras terapias Otro tipo de terapias o estrategias para minimizar la gonalgia incluyen el reposo, la ortesis o empleo de plantillas especiales en algunas patologías degenerativas, vendajes funcionales, estimulación eléctrica y la disminución de peso. Si una gonalgia no es tratada a tiempo puede ocasionar lesiones osteocondrales residuales y recurrentes con alteraciones en los mecanismos de extensión y flexión, lo que se traduce en importantes alteraciones de la movilidad y limitación funcional. Preguntas frecuentes ¿Qué diferencia hay entre gonalgia y gonartrosis? La gonalgia es un término que hace referencia al dolor en la articulación de la rodilla de forma general, generalmente como síntoma, en cambio, la gonartrosis, es una enfermedad articular crónica degenerativa y progresiva de la rodilla, que seguramente curse con gonalgia. ¿Se puede realizar ejercicio padeciendo gonalgia? El ejercicio ha demostrado ser beneficioso en la mayoría de las lesiones de rodilla. Es importante −siempre que esté indicado para su patología− realizar los ejercicios sin dolor. La monitorización de la dosis, la carga y el dolor durante el ejercicio serán fundamentales para realizar una buena administración del mismo. Es recomendable que consulte con su médico o fisioterapeuta los distintos ejercicios y frecuencia, dado que una mala gestión puede ser perjudicial. ¿Cuáles son las pruebas complementarias en caso de gonalgia? La mayoría de las patologías de rodilla pueden ser diagnosticados con la realización de una historia clínica, un examen físico y los estudios radiográficos pertinentes. Tras realizar el examen físico articular, el médico traumatólogo puede indicar alguna de las siguientes pruebas diagnósticas: Rayos Permite descartar enfermedades degenerativas y fracturas. Tomografía axial computerizada (TAC). Este método permite obtener imágenes radiográficas desde diferentes planos. Ecografía. Produce imágenes en tiempo real de las estructuras del tejido blando del interior y alrededor de la rodilla. Resonancia Magnética. Puede ser de utilidad para lesiones de ligamentos, cartílagos, músculos, tendones y tejido óseo. Análisis del líquido articular. El examen del líquido sinovial puede ser útil en diversos procesos como la artritis infecciosa y las artritis infecciosa y las artritis microcristalinas. Referencias y bibliografía Bunt, W., Jonas, C. E., & Chang, J. G. (2018). Knee Pain in Adults and Adolescents: The Initial Evaluation. American family physician , 98 (9), 576–585. Farha, N., Spencer, A., & McGervey, M. (2021). Outpatient Evaluation of Knee The Medical clinics of North America , 105 (1), 117–136. Michael, W., Schlüter-Brust, K. U., & Eysel, P. (2010). The epidemiology, etiology, diagnosis, and treatment of osteoarthritis of the knee. Deutsches Arzteblatt international , 107 (9), 152–162. Rishor-Olney, R., & Pozun, A. (2022). Prepatellar Bursitis. In StatPearls . StatPearls Publishing. Malliaras, , Cook, J., Purdam, C., & Rio, E. (2015). Patellar Tendinopathy: Clinical Diagnosis, Load Management, and Advice for Challenging Case Presentations. The Journal of orthopaedic and sports physical therapy , 45 (11), 887–898. Figueroa, D., Figueroa, F., & Calvo, R. (2016). Patellar Tendinopathy: Diagnosis and The Journal of the American Academy of Orthopaedic Surgeons , 24 (12), e184–e192. Gaitonde, Y., Ericksen, A., & Robbins, R. C. (2019). 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Exostosis
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Exostosis

¿Qué es la exostosis? La exostosis es el crecimiento anómalo de un hueso . Es un crecimiento benigno que puede rodearse de cartílago, conociéndose entonces como osteocondroma. Su situación es más común en los huesos largos, pero, se puede encontrar en cualquier hueso del cuerpo. Tipos de exostosis Existen diferentes tipos de exostosis: Exostosis múltiples hereditarias tipo 1 y 2: son formas genéticas en las que aparecen múltiples exostosis. Está presente desde la infancia. Exostosis subungueal: suele darse en individuos jóvenes, se sitúa en la falange distal del dedo gordo del pie y puede deformar la uña. Exostosis única en huesos largos: a menudo aparece en los huesos largos, con preferencia en la rodilla. Puede ser espontánea o estar relacionada con microtraumatismos deportivos. Exostosis palatina: excrecencia que se sitúa en el paladar y puede estar presente desde la infancia.  Exostosis auditiva: se produce un crecimiento del canal auditivo, esto se traduce en un estrechamiento del mismo que puede dar lugar a una sordera. Síntomas de exostosis En muchos casos, la exostosis es asintomática y solo se encuentra de forma fortuita al realizar al individuo radiología por otras causas. Cuando presenta síntomas, estos son dolor sobre la articulación en la cual se encuentra y excrecencia a modo de tumoración en la zona afectada. Puede producir también compresión de músculos o vasos en la zona afectada . Las exostosis auditivas pueden ocasionar una pérdida de audición que será el motivo por el cual el paciente acude a la consulta. Causas de exostosis Las exostosis múltiples tipo 1 y 2 son de origen genético, mutación en los genes EXT1 y EXT2 respectivamente, son múltiples las que aparecen y lo hacen a una edad temprana. Las exostosis únicas , ya sea en huesos largos o palatinas, suelen aparecer en edades adolescentes y se relacionan, en algunos casos, con traumatismos, aunque también pueden ser espontáneas. La exostosis auditiva se ha relacionado con los deportes en aguas frías, como el surf o el submarinismo, debido a las infecciones repetidas que sufren en los oídos. Tratamiento de exostosis El tratamiento de la exostosis es quirúrgico cuando sea necesario, procediendo a extirpar la tumoración. El tratamiento quirúrgico no siempre es necesario, ya que las exostosis no tienen por qué dañar ninguna estructura adyacente , dejan de crecer cuando lo hace el individuo, por lo que puede no ser necesaria su exéresis. Pruebas complementarias realizadas en caso de exostosis Las pruebas complementarias para llegar al diagnóstico de una exostosis son pruebas de imagen, mediante radiología simple de la parte afectada. En otras ocasiones, puede ser necesario un TAC , como en el caso de exostosis auditivas, que permita reconocer la estructura claramente. En algunos casos, puede requerir la biopsia para distinguirla de procesos malignos, aunque no suele ser necesario, ya que su imagen es bastante clara para el diagnóstico. Factores desencadenantes de exostosis Son factores desencadenantes de la exostosis pequeños traumatismos e infecciones de la zona afectada. Complicaciones de la exostosis Son complicaciones de exostosis la lesión que puede producir en la zona dañada. En el caso de las exostosis auditivas, puede producir falta de audición y, en casos de afectación a nivel articular, puede dar problemas de dolor en las articulaciones o dificultad para la movilidad.  Pueden producir compresión arterial y venosa y dar lugar a aneurismas en los vasos o fístulas arteriovenosas. La compresión puede darse a nivel de órganos internos, cuando se trata de una exostosis que afecta a una costilla . Hasta el 1 % de estas lesiones pueden malignizarse, aumentando al 10 % cuando se trata de exostosis múltiple hereditaria. Prevención de exostosis Con respecto a la prevención de la exostosis, la exostosis múltiple hereditaria no es previsible, salvo que se haga un estudio genético del feto por antecedentes familiares. En los casos de exostosis única, estas están relacionadas con microtraumatismos, por lo que, si evitamos esto, será menos frecuente. En los casos de exostosis auditivas , prevenir y protegerse de posibles infecciones auditivas al sumergirse en aguas frías, hará menos asiduo el problema. Preguntas frecuentes: ¿Dónde puede aparecer la exostosis? La exostosis se puede dar en cualquier hueso del cuerpo, siendo más frecuentes en huesos largos, en especial la rodilla, y siendo menos habituales las que afectan a los dedos de manos y pies . ¿Qué relación existe entre la exostosis y el osteocondroma? La exostosis y el osteocondroma es una denominación diferente del mismo proceso, en el cual, una masa de hueso se encuentra recubierta por una parte de cartílago que da lugar al osteocondroma. ¿Se puede prevenir la exostosis? La exostosis son lesiones difíciles de prevenir, aun cuando no son claramente hereditarias , si parece que hay cierta predisposición genética a sufrirla. En los casos de las auditivas, evitar el contacto con aguas muy frías que favorecen las infecciones dificultan su aparición. En los casos que se producen por golpes o traumatismos , solo evitando esto seremos capaces de disminuir la probabilidad de sufrir la enfermedad. Las exostosis múltiple hereditaria es genética y, por tanto, es prevenible .
Contusión
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Contusión

¿Qué es una contusión? Las contusiones son los golpes que se sufren en el organismo contra una superficie dura . Dichos golpes no penetran en el organismo, la lesión que produce puede ser desde un leve moratón, hasta lesiones sobre órganos internos, produciendo hematomas o afectaciones más graves. ¿Tienes dudas?  Regístrate ahora  en Savia y habla gratis con nuestros especialistas médicos por chat o videoconsulta. Tipos de contusiones Los diferentes tipos de contusiones son: Contusión simple: produce un leve enrojecimiento de la piel. Contusión de primer grado: se produce una equimosis por la rotura de pequeños vasos de la piel. La zona afectada tiene un ligero enrojecimiento. Contusión de segundo grado: se produce un hematoma en la zona afectada por extravasación sanguínea. Es producida en el tejido subcutáneo y puede aparecer inflamación de la zona. Contusión de tercer grado: se produce un daño en los tejidos profundos de la piel. Esto se debe al daño que sufren los vasos sanguíneos. Estas contusiones más profundas puede dañar órganos internos y también pueden llevar asociadas fracturas. La causa más típica son los accidentes de tráfico.   Síntomas de una contusión Los síntomas de una contusión son el dolor, el enrojecimiento, la inflamación y el hematoma . Causas de la una contusión Las causas de una contusión es el golpe contra una superficie dura, en dicho golpe no tiene que haber rotura de la piel . Las contusiones pueden ser leves, cuando sufrimos, por ejemplo, un golpe en la cabeza contra un estante o ser más graves cuando son, por ejemplo, a consecuencia de un accidente de tráfico . Tratamiento de contusiones Las contusiones de grado simple, uno y dos, solo necesitan frío local para producir una vasoconstricción que disminuya el sangrado y, por tanto, el hematoma. En los casos más graves, puede ser necesario intervenir por el daño sufrido sobre órganos internos o sobre los huesos, pudiendo ser necesaria la inmovilización de los mismos. Pruebas complementarias realizadas en caso de contusión En las contusiones simples o de primer y segundo grado, no es necesaria ninguna prueba diagnóstica. En los grados tres puede ser necesario realizar pruebas de imagen como radiografías, resonancia magnética, ecografías o TAC, que permitan conocer si hay lesiones en órganos internos, como hígado, páncreas, pulmones, o si existen fracturas óseas. ¿Tienes dudas?  Regístrate ahora  en Savia y habla gratis con nuestros especialistas médicos por chat o videoconsulta. Factores desencadenantes de contusión Las contusiones pueden tener múltiples causas desencadenantes, como son no prestar la atención debida al caminar por las calles, tropezar, golpearse contra muebles u otros objetos . En los casos de accidentes de tráfico, el factor desencadenante es el que produce el percance . Complicaciones de una contusión Las complicaciones de una contusión pueden ser las infecciones sobre el hematoma, cuando este es de gran tamaño y el encapsulamiento del mismo, que se traduce en un bulto en el lugar de la lesión. Por otra parte, las contusiones más profundas que afectan a los vasos sanguíneos profundos , pueden dar lugar a la necrosis de los tejidos que irrigan. Por último, en los casos de contusiones profundas, órganos como el bazo, el hígado o el páncreas, pueden sufrir roturas o fisuras que haya que reparar. Prevención de contusiones Para prevenir las contusiones, es necesario prestar atención a nuestro entorno, hay que tener especial cuidado y retirar alfombras, muebles, sillas etc. En las estancias en que se mueven personas mayores que tienen afectada la visión y el odio, así como el órgano del equilibrio, ya que favorecen los tropiezos y los golpes. En el caso de los niños, es importante evitar que se suban a sitios elevados y proteger los muebles que queden a su altura para evitar contusiones más importantes . El cierre de los muebles que se encuentran a la altura de nuestra cabeza, también evitará que nos golpeemos contra ellos sin darnos cuenta. Preguntas frecuentes ¿Cuánto tarda en curarse una contusión? Una contusión tarda en curar aproximadamente una semana , cuando se trata de una contusión superficial. En los casos de contusiones más importantes que dañan órganos o huesos, el tiempo de recuperación puede ser más largo, llegando a ser de un par de meses.   ¿Qué es una contusión profunda? Una contusión profunda es la que afecta al tejido subcutáneo , dañando los vasos sanguíneos y pudiendo llegar a producir la muerte de los tejidos.    ¿En qué puede derivar una contusión? Las contusiones, en la mayoría de ocasiones, no derivan en procesos graves, son hematomas más o menos profundos. Estos hematomas pueden sufrir un encapsulamiento y una infección posterior, en estos casos puede ser necesario drenarlos y poner un tratamiento de antibióticos adecuado. En contusiones sobre los órganos internos, estos pueden sufrir fisuras o roturas que produzcan hemorragias internas . ¿Tienes dudas?  Regístrate ahora  en Savia y habla gratis con nuestros especialistas médicos por chat o videoconsulta.
Condropatía rotuliana
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Condropatía rotuliana

¿Qué es la condropatía rotuliana? La condropatía rotuliana conocida también como condromalacia rotuliana es la afectación del cartílago de la rótula que se encuentra en el área interna de la misma, en la zona de contacto con el fémur y la tibia. La degeneración de este cartílago, ya sea por lesiones, por desviación de la rótula, por sobreesfuerzos o por luxación de esta, da lugar a un mayor rozamiento con los otros huesos de la rodilla y esto se traduce en dolor e inflamación. El fortalecimiento de los músculos de la rodilla mejora en parte este proceso . Síntomas de la condropatía rotuliana El síntoma principal de la condropatía rotuliana es el dolor, que puede ir desde un dolor fuerte y permanente, hasta un dolor más débil que solo aparece cuando se realiza un ejercicio mantenido con la rodilla, como puede ser correr. En algunas ocasiones, se puede presentar una ligera inflamación que no siempre está presente. El dolor no siempre es señal de la importancia de la lesión , así, ciertos pacientes pueden presentar un dolor fuerte a pesar de ser lesiones leves y, otros pacientes con dolor débil, presentar lesiones más graves. Otro síntoma frecuente es el chasquido de los huesos al mover la rodilla. Causas de la condropatía rotuliana Las causas de la condropatía rotuliana son diversas. En primer lugar, son frecuentes en personas que corren, ya que, los impactos repetidos sobre la zona de la rodilla pueden producir lesión, se produce en especial en corredores de maratón. También, el sobrepeso puede ocasionar esta lesión y en personas con problemas meniscales es más frecuente y en pacientes que tienen luxaciones de la rótula o una movilidad excesiva de la misma. Tratamiento de la condropatía rotuliana En inicio, es necesario el tratamiento con reposo y antinflamatorios no esteroides como el ibuprofeno . Durante el reposo, puede ser necesario usar rodilleras que inmovilicen la rodilla. La fisioterapia y establecer un programa de ejercicios que fortalezcan los músculos de la rodilla puede favorecer la disminución del dolor. La pérdida de peso suele ser beneficiosa . Mantener el normopeso ayuda a una menor sobrecarga de la rótula. Por último, en aquellos casos en que hay una movilidad excesiva de la rótula o esta se encuentra en una posición anómala , puede ser necesario una cirugía. Otras opciones de tratamiento son la inyección de ácido hialurónico en la articulación para mejorar la lubricación de la articulación y reducir el dolor y, para terminar, otra alternativa es la inyección de plasma enriquecido con plaquetas. Pruebas complementarias realizadas en caso de condropatía rotuliana La prueba complementaria más eficaz para el diagnóstico de condromalacia rotuliana y, siempre tras la exploración física e historia del paciente, es la Resonancia Magnética Nuclear. Factores desencadenantes de condropatía rotuliana Son factores desencadenantes de la condropatía rotuliana los ejercicios bruscos y repetidos , ya sean en atletas que sufren gran impacto sobre las rodillas, como pueden ser los corredores de maratón y personas que trabajan, por ejemplo, en la construcción. Y el exceso de peso es otro factor que también favorece la condropatía rotuliana. Complicaciones de la condropatía rotuliana La complicación de la condropatía rotuliana es el dolor, que da lugar a una impotencia funcional y, en muchos casos, a un descenso de la movilidad que se traduce a su vez en una pérdida de masa muscular que puede incluso acrecentar el dolor. Prevención de la condropatía rotuliana La prevención de la condropatía rotuliana consiste, principalmente, en evitar el sobrepeso y los sobreesfuerzos en los cuales se impacta especialmente sobre las rodillas. Esto evita en gran medida el proceso, sobre otros factores como puede ser la edad o la alteración en la localización de la rótula sobre los cuales no se puede influir. Preguntas frecuentes: ¿Qué grados de condropatía rotuliana existen? Existen cuatro grados de condropatía rotuliana , siendo el grado I el más leve y el grado IV el más grave: En el grado I, el cartílago es más blando de lo normal pero no se encuentra roto. En el grado II, el cartílago presenta pequeñas fisuras superficiales. En el grado III, aparecen fracturas más extensas en el cartílago.  En el grado IV, hay fracturas importantes con exposición del hueso subcondral y el cartílago se encuentra adelgazado en su totalidad. ¿Qué ejercicios se recomiendan para la condropatía rotuliana? Los ejercicios recomendados para pacientes que padecen condropatía rotuliana son aquellos que favorecen, principalmente, el fortalecimiento del músculo cuádriceps : Estirar la pierna con el pie hacia arriba (la persona está tumbada boca arriba) y elevar la pierna manteniendo la posición durante unos 10 segundos. Repetir entre 15 y 20 veces. Elevar la pierna sin extender el pie. Hacer unas 20 repeticiones en tandas de 10. Se puede realizar situando un peso en el tobillo. Sentarse en una posición firme y situar el tobillo sano contra la colchoneta haciendo fuerza contra ella. Situar el pie sano sobre el pie de la pierna afectada e intentar estirar la pierna lesionada contra la resistencia de la sana. Colocar el pie sano bajo el talón del pie de la pierna lesionada, intentando flexionar esta contra la resistencia de la pierna sana. ¿Qué relación existe entre la condropatía rotuliana y la meniscopatía? Aunque son dos entidades separadas, parece que aquellas personas que presentan meniscopatias , pueden tener con mayor frecuencia, también, condromalacia rotuliana.  Ambas enfermedades pueden darse por separadas. 
Capsulitis
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Capsulitis

¿Qué es la capsulitis? La capsulitis se define como la inflamación de la cápsula articular . La cápsula es el tejido fibroso que protege todas las articulaciones, por tanto, se puede tener una capsulitis en cualquier articulación, pero, las que con mayor frecuencia presentan esta afección son los hombros y las caderas. También se puede presentar con cierta frecuencia en las rodillas. Los deportistas que juegan al baloncesto o balonmano, pueden presentar esta afección en los dedos de las manos . Síntomas de la capsulitis El síntoma principal de la capsulitis es el dolor, este empieza de forma lenta y va aumentando con el uso de la articulación. La articulación afectada se puede ver inflamada y ligeramente caliente, el dolor puede ser muy tórpido en su evolución, pudiendo incluso extenderse durante meses . El dolor da lugar a una impotencia funcional, es decir, la movilidad articular se ve disminuida, tanto por el dolor que se produce al mover la articulación, como por la inflamación articular presente. Causas de la capsulitis En muchos casos es difícil buscar un único origen de las capsulitis. En personas deportistas, los microtraumatismos repetidos pueden dar lugar a una inflamación reactiva. En personas no deportistas, enfermedades reumáticas, diabetes y enfermedades de tiroides están entre las causas más frecuentes, también las sobrecargas articulares producidas por movimientos repetitivos con peso, el sobrepeso sobre articulaciones como rodilla o caderas o circunstancias con menopausia en las mujeres pueden producir la capsulitis. En muchas ocasiones, no es posible conocer el origen de las mismas. Tratamiento de la capsulitis El tratamiento de la capsulitis articular puede englobarse en tratamiento médico y fisioterapéutico. En el tratamiento con fármacos se usan antiinflamatorios y corticoides para disminuir la inflamación de la articulación afectada, también se puede inmovilizar la articulación durante un tiempo para evitar la sobrecarga en la misma. En el tratamiento fisioterapéutico, el tratamiento con termoterapia frío-calor puede ayudar a mejorar, además de los estiramientos sobre la articulación, el tratamiento con mesoterapia, el uso de la neuroestimulación mediante TENS y la crioterapia, son los tratamientos más utilizados para mejorar el dolor y recuperar la movilidad articular. En los casos de enfermedades como diabetes o problemas tiroideos , el control correcto de estas enfermedades favorece la mejora de la capsulitis. Pruebas complementarias realizadas en caso de capsulitis En las capsulitis, el primer diagnóstico debe ser mediante la exploración de la articulación, tanto en su aspecto exterior; inflamación, enrojecimiento y aumento de tamaño, como en la movilidad de la misma; valoración de los movimientos que pueden realizarse y cuáles no, si estos movimientos se pueden realizar contra resistencia o solo pasivamente y cuándo se inicia el dolor en los mismo. En las pruebas de imagen, se realiza un estudio radiológico que permite reconocer si las estructuras óseas están bien o si, por el contrario, se encuentran afectadas por alguna patología que explique el dolor. La Resonancia Magnética permite la correcta visualización de tendones y músculos. La ecografía permite conocer la presencia de derrames articulares. Y la artroscopia que, aunque es una prueba quirúrgica, puede permitir conocer las adherencias que la articulación presenta. Factores desencadenantes de capsulitis Son factores desencadenantes de la capsulitis las enfermedades crónicas como la diabetes, las enfermedades tiroideas, las enfermedades reumáticas y la menopausia, siendo más frecuente en mujeres de entre 50 y 60 años. Complicaciones de la capsulitis La complicación más frecuente e importante de la capsulitis es la pérdida de movilidad articular. En los hombros se conoce como el hombro congelado, en el cual, se produce una importante pérdida de movilidad, sobre todo, hacia la movilidad externa del mismo . Esta circunstancia puede hacer necesaria la cirugía artroscópica, para retirar las adherencias capsulares y mejorar la movilidad articular. Prevención de la capsulitis Aunque la causa de la capsulitis no es bien conocida si se relaciona con enfermedades como la diabetes, las enfermedades tiroideas y traumatismo repetidos o movimientos con peso, por ello el control de estas enfermedades de forma correcta y el movilizar la articulación sin peso puede prevenir la aparición de la enfermedad. Preguntas frecuentes: ¿Dónde puede aparecer la capsulitis? La capsulitis puede aparecer en cualquier articulación, las más frecuentes son la cadera y el hombro (el hombro es la más común puesto que es la articulación del organismo que mayor movilidad presenta). En deportistas que usan en su deporte las manos , pueden presentar con frecuencia capsulitis en los dedos de las manos. ¿Qué ejercicios se recomiendan para la capsulitis? Los ejercicios de la capsulitis deben ir encaminados a producir una relajación de la articulación y un estiramiento de los músculos. Aunque en cada articulación son diferentes, vamos a describir los ejercicios del hombro por ser esta la capsulitis más frecuente: Ejercicio pendular , se apoya el brazo en un silla o mesa y el otro se deja colgando, procediendo a moverlo hacia delante y hacia atrás y realizando círculos, durante unos tres minutos. Debe realizarse al menos una vez al día. Cuando se consigue que este ejercicio se realice sin dolor, podemos añadir algo de peso en la mano, realizando el ejercicio de igual forma. Ejercicio de estiramiento del hombro , se procede a situar el antebrazo sobre una mesa y se aleja la mano y el antebrazo apoyado en la misma, inclinando el tronco hacia delante. En el momento que se sienta dolor se mantendrá esta posición durante unos cinco segundos. Elevación del brazo en supino ayudado por el otro, se tumba el paciente sobre una superficie firme, se agarra la muñeca con la mano contralateral y se procede a elevar el brazo de forma pasiva hasta sentir dolor, en este punto, se mantiene la posición durante 5 segundos. Elevación con barra, el paciente está tumbado en decúbito supino y agarra una barra con las dos manos separadas a la anchura del hombro, y se procede a elevar ambos brazos a la vez hasta el punto de dolor, en este, se mantiene durante 5 segundos. ¿Qué relación existe entre la capsulitis y la bursitis? La bursitis es la inflamación de la bursa que recubre un músculo en concreto. La capsulitis es la inflamación de la cápsula que recubre toda la articulación. Por tanto, el proceso de la capsulitis es más amplio que la bursitis , que es de una zona más concreta, ambas pueden producir dolor articular e inflamación, pero, la bursitis, produce dolor en movimientos más concretos, mientras que la capsulitis limita la casi totalidad de movimientos de una articulación.
Lesión de Isquiotibiales en el Fútbol
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Lesión de Isquiotibiales en el Fútbol

José María tiene 24 años , estudia Derecho y juega en dos equipos de futbol. Hace un mes, comenzó a tener molestias en la parte posterior de la pierna. El domingo tuvo partido y al final de la primera parte corriendo hacia el balón, sintió un fuerte pinchazo en la pierna  y tuvo que retirarse porque el dolor no le permitía seguir. Su entrenador le recomienda que se ponga frío durante los 2 días siguientes y que guarde reposo. Una semana después sigue con dolor en la pierna, no puede correr y cuando está tiempo sentado el dolor aumenta. Una de las lesiones más frecuentes de los futbolistas son las microroturas en la zona de los isquiotibiales, concretamente en el bíceps femoral. Los isquiotibiales forman parte de los músculos de la pierna, están formados por tres músculos: el bíceps femoral, el semimembranoso  y el semitendinoso, los tres unen la pelvis con la rodilla por la parte posterior y su principal función es flexionar la rodilla . Esta lesión suele aparecer después de unos minutos jugando a una intensidad alta. Los músculos están fatigados y la sincronización entre los grupos musculares falla y como respuesta podemos tener un tirón muscular (si el músculo se contrae de forma continua) una microrotura o desgarro muscular (si se rompen parte de las fibras musculares) o una rotura completa (si la intensidad de la contracción es demasiado fuerte). En el caso de José María, la molestia comenzó al final de la primera parte del partido. Es posible que sus músculos se fatigaran y no soportaran la intensidad que el partido requería. Le preguntamos por la frecuencia de sus entrenos, nos cuenta que las semanas antes del partido debido a los exámenes había dejado de entrenar y además había cogido peso. Cuando palpamos la zona de dolor, sentimos que en una zona del músculo (bíceps femoral) nuestros dedos se hunden, duele, la zona está más caliente y hay  hematoma. El diagnóstico es ROTURA DE FIBRAS EN EL BICEPS FEMORAL . Jose María llega a la consulta una semana después de producirse la lesión. Ha estado aplicando frío y guardando reposo como le dijo su entrenador de forma que la fase inflamatoria aguda ha pasado y después de 7 días la rotura fibrilar está comenzando a cicatrizar. Nuestro objetivo en la primera sesión será: 1º Establecer una buena movilidad de todas las articulaciones relacionadas con la lesión : La pelvis, la rodilla, el tobillo y el pie. Cuando se produce una lesión de estas características debemos comprobar que las estructuras relacionadas con la lesión se mueven correctamente. Esto facilitará el tiempo de recuperación y evitará lesiones en ocasiones posteriores. 2º Proporcionar una buena circulación sanguínea para ayudar en el proceso de cicatrización y drenar el exceso de líquido que se ha acumulado en la zona . Para ello realizamos técnicas de masaje en todo el grupo muscular. 3º Ayudar a la cicatriz para que se forme correctamente evitando fibrosis y adherencias musculares . Realizamos movilizaciones y estiramientos de forma suave y controlada para activar el músculo. Terminamos la sesión utilizando un vendaje neuromuscular o  kinesiotaping con el objetivo de dar estabilidad a la zona y mantener el músculo relajado hasta la próxima sesión. Recomendamos a José María caminar mínimo 1hora al día y realizar estiramientos suaves de los principales músculos del miembro inferior. (Isquiotibiales, gemelos,  cuádriceps, Psoas iliaco, aductores y tensor de la fascia lata). En la segunda sesión han pasado dos semanas, José María se encuentra mejor, ya no siente dolor cuando está sentado pero cuando corre sigue notando molestias. La zona de lesión tiene mejor aspecto, el hematoma se ha reducido casi por completo, cuando palpamos la zona lesionada hay un ligero dolor y la temperatura en la zona está normalizada. El objetivo en esta sesión será: 1º Relajar la musculatura con técnicas manuales . 2º Recuperar todo el movimiento de la articulación de la pelvis, la rodilla y el pie . 3º Trabajar  la fuerza de la pierna con ejercicios isométricos y  excéntricos . 4º Realizar estiramientos pasivos de todos los grupos musculares de la pierna . Después de la sesión recomendamos a José María realizar ejercicios en el gimnasio durante la siguiente semana. – 10 minutos de bici o elíptica para el calentamiento. -Potenciación de los abdominales (planchas) – Potenciación excéntrica de los isquiotibiales – Ejercicios de propiocepción. Y para terminar estiramientos de todos los músculos de la pierna prestando más atención a los isquiotibiales . Una semana después de realizar estos ejercicios, recomendamos: -sustituir los 10 minutos de bici por carrera continua e ir aumentando de intensidad y tiempo de forma progresiva a lo largo de los días. -Seguir con los ejercicios de activación abdominal -Seguir con los ejercicios excéntricos pero aumentando la intensidad y las repeticiones – Realizar ejercicios de potenciación concéntrica. -Terminar el entreno con ejercicios de propiocepción y estiramiento. A las 5 semanas José María juega un torneo de fin de semana sin tener ninguna molestia. Debemos tener en cuenta que la lesión en los isquiotibiales puede reaparecer durante las dos semanas después de comenzar a jugar. Para evitarlo recomendamos a José María: 1º Realizar una alimentación adecuada y tener una buena hidratación . 2º Realizar entrenamientos fuera de los partidos realizando : – ejercicios de potenciación de la musculatura de la pierna y el abdomen. – ejercicios excéntricos de los isquiotibiales. -Ejercicios de propiocepción de los miembros inferiores. -Ejercicios de estiramientos (después de cada entreno y de cada partido). Artículo escrito por Patricia de Maya. (Fisioterapeuta)
Rotura de Menisco: Alternativas Terapéuticas en la Actualidad
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Rotura de Menisco: Alternativas Terapéuticas en la Actualidad

En la rodilla disponemos de dos meniscos: el interno y el externo y se encuentran alojados en el espacio interarticular entre el fémur y la tibia. Su función es la de amortiguar la fuerza y la carga que recaen sobre la superficie articular durante el movimiento favoreciendo la congruencia articular. MENISCOS Los meniscos son estructuras fibrocartilaginosas en forma de media luna situadas en las articulaciones, concretamente entre las superficies articulares de los dos huesos que la conforman. A pesar de que los meniscos de las rodillas son los protagonistas, existen muchas otras articulaciones con menisco en el cuerpo humano como son la clavícula, las costillas, la muñeca y la mandíbula. El menisco interno tiene forma de semiluna mientras que el externo es casi circular. Curiosamente son más frecuentes las lesiones del menisco interno. Cada menisco posee un cuerpo y unos extremos llamados cuernos . Por ser de consistencia cartilaginosa no es posible visualizarlos en una radiografía convencional por lo que cuando la exploración nos sugiere una posible lesión meniscal precisamos hacer un estudio mediante una resonancia magnética nuclear para confirmarla. Asimismo, y en función del tipo de lesión, existe una batería de tratamientos a considerar en función, sobre todo, de la edad del paciente, hábito deportivo, actividad laboral y entorno médico. De entre las lesiones meniscales más frecuentes podríamos citar el quiste meniscal, el bloqueo meniscal, la meniscitis y la rotura meniscal. ¿Cuál es el mecanismo lesional más frecuente del menisco? En general, podríamos citar la entorsis de rodilla o giro brusco como principal causa de lesiones meniscales. Supone un cizallamiento de su superficie pudiendo ocasionar una simple inflamación (meniscitis) o una solución de continuidad (rotura meniscal). En pacientes jóvenes estos giros bruscos de la rodilla aparecen normalmente durante la práctica de actividad deportiva (futbol, skate, artes marciales…). Sin embargo, en edad adulta es mucho más frecuente la lesión meniscal por causa artrósico-degenerativa o traumática. ¿Cómo se actúa ante una lesión? Ante una lesión meniscal de rodilla podemos encontrarnos un dolor en fase aguda a nivel de la cara interna o externa coincidiendo con la línea interarticular donde se alberga el menisco lesionado.  Puede o no aparecer derrame articular e incluso un bloqueo articular que impediría al paciente extender totalmente su rodilla.  Dicho sea de paso, en caso de bloqueo meniscal es necesario acudir a urgencias para recolocar el menisco en su espacio articular.  A pesar de que en el servicio de urgencias no se realiza la resonancia magnética nuclear es importante la visita ya que la exploración será muy evidente y específica. Existen múltiples maniobras meniscales para la exploración de los meniscos de las rodillas. Asimismo, nos pueden solicitar una radiografía que puede mostrar lesiones asociadas al menisco y el estado óseo de la articulación. En fase aguda iniciaremos un tratamiento sintomático, generalmente con analgésicos y/o antiinflamatorios. Aplicaremos frío local (crioterapia) sobre la zona afecta, pero siempre interponiendo un paño entre la piel y el hielo para evitar quemaduras cutáneas y con una frecuencia alta y duración aproximada de 15-20 minutos en cada ocasión. Además, realizaremos un reposo relativo, no hace falta que estemos en reposo absoluto en cama, pero podemos estar sentados en el sofá con la pierna en alto y aplicándonos la crioterapia. En algunas ocasiones será necesaria la colocación de un vendaje con finalidad antiinflamatoria. Si la lesión es leve… En este caso el tratamiento es resolutivo, aunque puede ser necesaria la realización de un tratamiento rehabilitador para erradicar absolutamente los síntomas. Ahora bien, si no conseguimos controlar los síntomas debemos acudir nuevamente a visita médica pues puede ser el momento de solicitar la resonancia para ver el estado del menisco dañado. La resonancia magnética nuclear es la prueba prínceps para valorar tanto las lesiones meniscales como las ligamentosas y cartilaginosas. Una vez confirmada la lesión meniscal podemos encontrarnos diferentes alternativas terapéuticas. Normalmente se opta por el tratamiento conservador en primer lugar, haciendo hincapié en el tratamiento rehabilitador. Ocasionalmente, pueden administrarse infiltraciones con corticoides o terapias biológicas . Por supuesto, recomendaremos reposo deportivo. En caso de que el tratamiento conservador no consiga erradicar los síntomas o la lesión meniscal sea severa debemos optar por la opción quirúrgica donde, de nuevo, encontraremos diferentes opciones terapéuticas, siendo las más frecuentemente empleadas: Meniscectomía parcial: es una cirugía conservadora en la que se realiza la resección del fragmento meniscal lesionado manteniendo el resto de menisco sano en su localización habitual. Sutura meniscal : técnica de más reciente incorporación que opta por suturar el fragmento roto del menisco sin necesidad de resecarlo. Precisa un cirujano experimentado. Persigue la conservación de la integridad articular evitando procesos artrósicos secundarios. Ambos procedimientos se realizan mediante la técnica artroscópica sin necesidad de incisión cutánea y cuya recuperación es de corta duración, aunque suele precisarse un tratamiento rehabilitador coadyuvante.
Síndrome del Túnel Carpiano
Artículo especializado

Síndrome del Túnel Carpiano

Las manos son imprescindibles para comunicarnos con nuestro entorno. La mayoría de las actividades de la vida diaria las realizamos gracias a la precisión y destreza de sus movimientos. Quizá por ello, cuando aparecen síntomas en la articulación de la muñeca puede llegar a ser muy incapacitante. Una de las lesiones más frecuentes que afecta a esta estructura es el Síndrome del túnel carpiano. ¿Qué es el túnel carpiano? Como su propio nombre indica, la disposición anatómica de los huesos de la muñeca forma un canal por donde pasan los tendones encargados de flexionar la muñeca y  junto a ellos, el nervio mediano y sus estructuras vasculares. Este canal está cerrado anteriormente por una vaina fibrosa que hace la función de un ligamiento llamado ligamento trasverso del carpo o retináculo flexor. ¿Qué función tiene el ligamento trasverso del carpo? Este ligamento es una vaina fibrosa que limita (cierra) anteriormente el canal del  carpo. Cuando la muñeca realiza los movimientos de flexión y extensión, los músculos, nervios y estructuras vasculares de la muñeca se deslizan (longitudinal y trasversalmente) a lo largo de este canal de forma que el ligamento trasverso actúa como una polea de reflexión para los tendones, proporciona estabilidad e impide que las estructuras salgan fuera del canal. ¿Qué es el síndrome del túnel  Carpiano? El nervio mediano tiene su origen en el plexo braquial, una estructura estrechamente relacionada con las cervicales y situada en la base del cuello cuya función es trasmitir la información nerviosa de todo el miembro superior. Este nervio realizará su recorrido a través de brazo, pasando por el codo, atravesando la musculatura del antebrazo hasta llegar a la articulación de la muñeca donde utilizará el canal del carpo para pasar a través de él  y llegar junto a la musculatura flexora hasta los dedos. Su función es inervar de forma sensitiva los dos tercios de la  de la mano incluyendo los tres primeros dedos. También tiene una función motora, dando información a los músculos flexores de la mano junto con la eminencia tenar. Frank H. Netter, Atlas de Anatomía Humana – 5ta Edición, Nervio Mediano El nervio mediano tiene la capacidad de adaptarse a cualquier movimiento de nuestro brazo deslizándose a través de las envolturas que le rodean aunque es susceptible de sufrir atrapamientos  a lo largo de su recorrido. Una de las zonas más frecuentes de atrapamiento es la zona del túnel del carpo. En el caso de que este canal sufra una disminución de su diámetro, bien por algún traumatismo, una infección del nervio, por realizar ejercicios repetitivos o posturas de compresión mantenidas con la muñeca se puede producir un proceso inflamatorio por compresión del nervio generando una neuropatía. Cómo consecuencia, la vascularización del nervio estará disminuida y su conducción eléctrica se verá afectada dando lugar a sensación de hormigueo, calambres e incluso dolor a nivel de la mano. Si esta situación se mantiene en el tiempo, la musculatura de la mano (eminencia tenar) también podría verse afectada, produciendo una atrofia muscular  y perdiendo la funcionalidad de la mano. ¿Qué pruebas se realizan para un correcto diagnostico del síndrome del túnel carpiano? Existen  pruebas clínicas que ponen en evidencia el compromiso del nervio mediano al paso por la articulación de la muñeca aunque no son determinantes pueden ayudar al diagnostico. La maniobra de PHALEN : juntar los dorsos de las manos en flexión de muñeca durante 60 segundos esperando que aparezcan hormigueos en los 3 primeros dedos. El signo de  TINNEL: se trata de percutir el nervio en la zona afectada (ligamento transverso) y ver si se desencadena alguna sintomatología relacionada con el nervio. La electromiografía también es una prueba para determinar si la conducción del nervio está afectada. ¿Cómo podremos tratar el síndrome del túnel carpiano? El objetivo para el tratamiento irá destinado a aumentar el diámetro del túnel para disminuir la presión y suprimir la inflamación. De esta forma, el nervio tendrá más espacio para deslizarse  con mayor facilidad y cuando solicitemos los movimientos repetitivos de la mano  los síntomas aparecerán con más retardo. Como tratamiento conservador podremos: Realizar técnicas de fisioterapia Tratar las cervicales , punto de origen del nervio mediano. Liberar los puntos de atrapamiento del nervio a nivel muscular en su recorrido por  todo el miembro superior. Realizar técnicas manuales a nivel de la muñeca para aumentar el diámetro del canal del carpo. Trabajar a n ivel del nervio utilizando la técnica neurodinámica. Los últimos estudios evidencian la eficacia de la técnica neurodinámica como tratamiento principal para el Síndrome del túnel carpiano. Recomendar el uso de férulas nocturnas que aumenten el diámetro del carpo, manteniendo una posición en extensión de muñeca para aliviar la presión y disminuir la inflamación. Infiltraciones de esteroides El tratamiento quirúrgico , se efectuará en caso de haber una respuesta negativa al proceso conservador. En estos casos se realiza un corte a nivel del ligamento transverso del carpo para  aumentar el espacio en el túnel y disminuir la presión del nervio junto a las estructuras que pasan  a su través. Prevención En el trabajo, es recomendable  acondicionar las actividades usando pautas ergonómicas que impidan movimientos repetitivos con la muñeca o posturas mantenidas con las manos en flexión. Por ejemplo: modificar la herramienta y los utensilios de trabajo. Tener una buena conciencia corporal : para modificar el gesto que produce la irritación nerviosa. Tener periodos de descanso cuando la actividad que estamos realizando demanda el uso de la articulación de la mano durante un tiempo prolongado. (Coser, atornillar…) Cuidar nuestra salud : mantener un peso saludable, control en el caso de que haya alguna enfermedad como la diabetes o la artritis porque son susceptibles de originar un síndrome del túnel carpiano. ¿  Sabías que…? Los últimos estudios evidencian que la técnica neurodinámica es un tratamiento efectivo para el síndrome del túnel carpiano. ¿Sabías que…? Las mujeres en el embarazo pueden sufrir el Síndrome del Túnel carpiano debido a un edema local producido por los cambios hormonales. Artículo escrito por Patricia de Maya. (Fisioterapeuta)
Fascitis Plantar
Artículo especializado

Fascitis Plantar

La fascia es un tejido continuo que envuelve todo nuestro cuerpo desde la cabeza hasta los pies. A lo largo de su recorrido se ancla a los huesos para reforzar su función y en las zonas de carga es capaz de aumentar su densidad para dar soporte y refuerzo. Es el caso de la fascia que recubre la planta del pie, llamada fascia plantar . Esta fascia se ancla a hueso del talón y se dirige abriéndose en abanico a las bases de cada uno de los dedos. Su estructura es fuerte, densa y resistente, forma los arcos plantares del pie cuya función es amortiguar y repartir el peso de nuestro cuerpo.   ¿QUE ES LA FASCITIS PLANTAR? Cuando la parte de la fascia que recubre la planta del pie se inflama, se produce una fascitis plantar. Es una de las causas más frecuentes de consulta médica en los dolores de pie. La recuperación es lenta por eso es importante determinar la causa que produce la inflamación y reducir el tiempo de lesión. ¿POR QUÉ SE PRODUCE UNA FASCITIS PLANTAR? Esta patología se presenta principalmente en personas de mediana edad y afecta por igual a los hombres y a las mujeres. Hay factores que pueden ser el origen de esta lesión, por ejemplo: Una carga excesiva: Cuando estamos de pie, caminamos o corremos la carga del cuerpo se transmite al arco del pie mantenido por la fascia plantar, si la carga es mayor de lo que el  arco del pie puede tolerar, la fascia sufrirá un sobre estiramiento y se inflamará. Es el caso de marchas o carreras prolongadas por terrenos irregulares o de personas con sobrepeso. Personas que tienen un Síndrome del túnel tarsiano :  donde se alteran los nervios y tendones que llegan al pie. Factores que modifiquen la pisada : el uso de zapatos o zapatillas deportivas inadecuadas con suelas demasiado rígidas o demasiado flexibles. Las personas que tienen poca flexibilidad en los músculos de la pierna (gemelos y sóleo) son más vulnerables a tener mayor tensión en la fascia plantar. Fracturas por estrés en el talón. Aumento de peso repentino (embarazo):  donde el sistema músculo ligamentoso que sujeta el pie resulta insuficiente para el peso de la persona. Degeneración del tejido: Con la edad, el tejido conjuntivo que forma la fascia comienza a perder elasticidad y se vuelve más vulnerable a los microtraumatismos que se producen a nivel de los pies. Enfermedades sistémicas como la artritis : en épocas de crisis inflamatorias las fascia plantar puede ser una de las zonas afectadas. SÍNTOMAS La fascitis plantar se caracteriza por un dolor agudo en la base del talón o localizado en la parte interna del tobillo. Es común que aparezca después de una larga jornada caminando con zapatos planos, a partir de ese momento, el dolor aumenta progresivamente y se focaliza cada vez más en el talón. El dolor puede presentarse de dos formas: Un dolor después del reposo: Es muy característico un dolor agudo en la zona del talón que aparece por las mañanas, cuando plantamos el pie en el suelo tras un periodo de descanso o después de estar en la oficina sentados y retomamos la marcha. Este dolor desaparece a los 10 minutos de caminar. Un dolor por sobreuso: Se caracteriza por ser un dolor sordo, que aparece cuando estamos de pie o caminando. En este caso, el dolor se localiza en el talón y en la parte interna del tobillo. Debemos tener en cuenta que el músculo Sóleo cuando tiene activos sus puntos gatillo, origina un dolor en la planta del pie similar al de la fascitis plantar de forma, que puede llevarnos a error en el diagnóstico, este dolor no lo producirá la inflamación de la fascia si no la sobrecarga muscular del sóleo. ¿CÓMO TRATAR LA FASCITIS PLANTAR? El tratamiento conservador es casi siempre eficaz aunque el tiempo de recuperación puede llevar meses. En la fase de inflamación aguda , debemos  guardar reposo y poner frío en la planta del pie: Utilizaremos bolsas de hielo para producir analgesia en la zona y podremos dar un masaje de 10 minutos. Realizaremos 3 o 4 repeticiones al día.    Utilizaremos baños de contraste : usaremos dos recipientes uno de agua fría y otro con agua caliente, pondremos el pie durante un minuto en cada recipiente y repetiremos hasta que la temperatura de ambos recipientes sea similar. Realizaremos estiramientos activos de los músculos posteriores de la pierna : Isquiotibiales, sóleos y gemelos. Aguantaremos el estiramiento durante 20 sg y lo realizaremos dos veces al día. Realizaremos estiramientos locales de la fascia plantar: con ayuda de una pelota de tenis o un recipiente duro y redondo (una botella) haremos pases y círculos sobre la planta del pie. Vendaje neuromuscular: el vendaje neuromuscular en muchas ocasiones alivia y quita el dolor en el momento. Podremos usar plantillas de silicona para amortiguar la carga , si aún así no cesa el dolor es recomendable hacer un estudio de la pisada con un podólogo experto para diseñar unas plantillas que corrijan la pisada y mantengan el arco plantar. Usar férulas por la noche para mantener estirados la musculatura posterior de la pierna Infiltrar corticoides a nivel local , cuando el tratamiento conservador no da resultados. Operar, siempre que el tratamiento conservador no de resultados: en la operación se realiza un corte en la fascia para liberar la tensión y disminuir la inflamación. ¿LA FASCITIS PLANTAR PUEDE SER CAUSA DE UN ESPOLÓN CALCÁNEO? Durante mucho tiempo, la fascitis plantar ha sido diagnosticada como causa de espolón calcáneo. Un espolón calcáneo es un saliente óseo en el talón producido por una tensión constante de los tejidos que se insertan en él, entre otros la fascia. De forma que lo que duele no es el espolón si no el proceso inflamatorio que se produce en la fascia plantar. Hoy en día, se sabe que un espolón no causa inflamación en la fascia si no que la tensión excesiva de ésta es la que produce el espolón. ¿Sabías que..? La fascitis plantar constituye del 15% al 20% del total de las dolencias que afectan al pie y es la causa más frecuente de consulta médica por patología a este nivel. En el 80-90% de los casos tiene una duración de 6-18 meses. ¿Sabías que…? La fascitis plantar afecta aproximadamente al 10% de los corredores durante su carrera deportiva y a una proporción similar de la población general a lo largo de su vida. Artículo escrito por Patricia de Maya. (Fisioterapeuta)
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Somos conscientes de que los conceptos médicos pueden resultar confusos si no te los explican con claridad. Para evitar esto, le hemos pedido a nuestros profesionales que preparen estas fichas en donde podrás acceder a información relevante sobre enfermedades que te ayudará a entender de una manera sencilla por qué se producen y por qué es necesario su tratamiento.
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Bursitis de Codo
Enfermedad

Bursitis de Codo

¿Qué es la bursitis en el codo? La bursitis de codo es la inflamación de la bolsa sinovial de dicha articulación . Las bolsas sinoviales presentan líquido en su interior y son las encargadas de amortiguar el roce de huesos y tendones. ¿Tienes dudas?  Regístrate ahora  en Savia y habla gratis con nuestros especialistas médicos por chat o videoconsulta. Tipos de bursitis en el codo Existen dos tipos de bursitis de codo: Bursitis profunda: producida por la inflamación de la bursa profunda, que se encuentra en la zona más honda de la articulación, cubriendo los músculos o la relación entre músculos y huesos. Bursitis superficial: se encuentra situada en la parte superficial de la articulación, sobre los epicóndilos y el olécranon, es la que con mayor frecuencia se inflama en el codo. Causas de la bursitis en el codo Las causas de la bursitis son las enfermedades inflamatorias como gota, condrocalcinosis, artritis reumatoide, y enfermedad por depósito de cristales de hidroxiapatita. Se puede producir también por la ejecución de movimientos repetitivos, por apoyo continuo sobre los codos (codo de estudiante) o por traumatismos en la zona. Síntomas de la bursitis en el codo Los síntomas de la bursitis son la presencia de inflamación en la zona, dolor, enrojecimiento y, en la exploración, puede notarse un bulto blando al tacto . En algunas ocasiones, sobre una bursitis se puede producir una infección, dando lugar a dolor intenso, enrojecimiento y calor local, pudiendo presentar el paciente fiebre. ¿Tienes dudas?  Regístrate ahora  en Savia y habla gratis con nuestros especialistas médicos por chat o videoconsulta. Tratamiento de la bursitis en el codo El tratamiento de la bursitis tiene una parte de tratamiento local, otra de tratamiento medicamentoso y, por último, una parte de tratamiento quirúrgico, según la evolución del proceso. Tratamiento local: se pone hielo sobre la zona afectada para mejorar la inflamación. Tratamiento médico: se inicia el tratamiento con fármacos antiinflamatorios tipo ibuprofeno seguido, si no mejora, de corticoides orales y también se debe tratar la enfermedad de base. Es decir, en los casos de artritis reumatoidea puede ser necesario tratamiento con metotrexate, en los casos de enfermedades por depósito de cristales tratamiento con colchicina, etc. En pacientes que presentan infección, se requiere tratamiento antibiótico y puede ser necesario retirar líquido para aliviar los síntomas. En algunos casos puede ser necesario el tratamiento quirúrgico, consistente en la extirpación quirúrgica de la bolsa, aunque este no suele ser frecuente. También se pueden realizar ejercicios que fortalezcan la zona y eviten parte del dolor. Pruebas complementarias de la bursitis en el codo Las pruebas complementarias para el estudio de la bursitis son análisis de sangre , para conocer posibilidades de enfermedades inflamatorias o gota y, también se puede realizar un análisis del líquido extraído . Pruebas de imagen como radiografía simple del codo, sobre todo para descartar que el dolor esté relacionado con otros factores implicados, ecografía y resonancia magnética, para realizar estudios de las bursitis profundas . Factores desencadenantes de la bursitis en el codo Los movimientos repetitivos o los procesos en los cuales se produce un apoyo continuado sobre la articulación , pueden dar lugar a una bursitis en el codo. Factores de riesgo de la bursitis en el codo Los factores de riesgo para la bursitis son las enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide , la gota, las enfermedades por depósito de cristales de hidroxiapatita y la condrocalcinosis. Complicaciones de la bursitis en el codo La complicación de la bursitis del codo es una bursitis infecciosa , esta puede dañar la articulación de forma importante y, en estos casos, es necesario un tratamiento antibiótico.   Prevención de la bursitis en el codo Para prevenir la bursitis del codo es conveniente evitar movimientos repetitivos de estirar y flexionar el codo , también el permanecer apoyado sobre el codo durante periodos muy largos, ya que, esta acción traumatiza la zona del codo y produce la inflamación de la bolsa . Especialidades a las que pertenece La bursitis es tratada por el especialista en reumatología y, en los casos en que se necesita cirugía, se trata por parte de traumatología. Los casos leves pueden ser tratados por el médico de familia con antinflamatorios. Preguntas frecuentes ¿Cómo se llama el líquido del codo? El líquido del codo se llama líquido sinovial . Cuando se produce una inflamación de la bolsa sinovial se conoce como bursitis. Cuando la bursitis se produce en la zona del olécranon se denomina bursitis olecraniana. ¿Qué es el Olécranon del codo? El olécranon es la extremidad del cúbito que articula en el codo del hueso humeral, tiene forma piramidal. Si se palpa el codo, es la zona dorsal que sobresale, al ser una zona ósea prominente, es fácil que sobre ella se produzca una fractura al caer. En este caso se precisa, en la mayoría de ocasiones, cirugía para proceder a la fijación de la misma. ¿Qué huesos forman la articulación del codo?   La articulación del codo está formada por tres huesos: el húmero, es el hueso largo del brazo, en su extremo distal articula con el cúbito y el radio, que son los dos huesos que tiene el antebrazo. Los huesos cúbito y radio articulan entre sí , y ambos articulan también con el húmero. Aunque la articulación del codo es solo una, tiene tres superficies articulares: la radio cubital, la radio humeral y la cúbito humeral. ¿Cuáles son las bolsas serosas? Las bolsas serosas del codo son las bolsas superficiales y las bolsas profundas. Las superficiales comprende la bolsa olecraniano que recubre el olécranon y, las bolsas profundas son las que recubren las inserciones musculares de músculos que se insertan en los diferentes huesos del codo. ¿Qué es la epicondilitis? La epicondilitis es la inflamación de la zona de inserción de los músculos en el epicóndilo , que forma parte del húmero. El dolor se produce en la zona externa del codo, suele deberse a la inflamación en el tendón extensor radial corto del carpo. ¿Tienes dudas?  Regístrate ahora  en Savia y habla gratis con nuestros especialistas médicos por chat o videoconsulta.
Osteopenia
Enfermedad

Osteopenia

¿Qué es la osteopenia? La osteopenia es una disminución de la densidad mineral ósea por la que el hueso se vuelve más poroso, disminuyendo su masa, en la que todavía no se han presentado cambios definitivos en su estructura. La osteopenia es una alteración de diagnóstico densitométrico, es decir, se establece con la realización de una densitometría ósea al paciente, determinando con ello lo que es, según los resultados de esta prueba, la disminución de la densidad ósea comprendida entre 1 y 2.5 desviaciones estándar por debajo del valor de referencia de la población normal. Se puede considerar un paso previo a la osteoporosis, aunque no todo el mundo que presenta osteopenia va a desarrollar una osteoporosis en el futuro. Junto con la osteoporosis, la osteopenia es la enfermedad ósea más frecuente. Afecta en su mayoría a mujeres mayores de 50 años, aumentando su prevalencia según aumenta la edad. La osteopenia es una alteración de una gravedad leve-moderada, siendo un factor de riesgo que se suma a la osteoporosis, la edad, riesgo de caídas… etc, para el padecimiento de fracturas óseas. Causas de la osteopenia La osteopenia viene determinada por el pico máximo de masa ósea que cada individuo tiene y que se suele alcanzar a en torno a los 25-30 años. A partir de los 40 años la masa ósea va disminuyendo, habiendo un desbalance en los procesos de destrucción y producción de hueso que se producen durante toda la vida adulta, determinado por factores genéticos y la disminución de estrógenos en mujeres postmenopáusicas. Síntomas de la osteopenia La osteopenia en sí misma, como la osteoporosis, no produce síntomas claramente achacables a su padecimiento , salvo cuando se producen fracturas o microfracturas óseas. Tratamiento para la osteopenia El tratamiento de la osteopenia está basado en la indicación de realización de medidas generales como realizar ejercicio (andar, correr, nadar…) y administrar en la dieta un adecuado aporte de calcio y vitamina D. Cuando se determina analíticamente que existe déficit de estos dos componentes, el médico puede indicar un tratamiento específico según la carencia que se establezca de vitamina D y calcio en el paciente. En principio, los fármacos que se utilizan para el tratamiento de la osteoporosis no están aprobados para su uso en el tratamiento de la osteopenia, reservándose a los casos de diagnóstico de osteoporosis asociados a un aumento real de riesgo de fracturas. Pruebas complementarias del tratamiento de la osteopenia Se puede realizar una analítica de sangre con determinación de calcio, fósforo y fosfatasa alcalina, entre otros. La prueba complementaria de referencia para poder decir que un paciente tiene osteopenia es la densitometría ósea o DEXA ( Dual Energy X-Ray Absorptiometry ), prueba precisa que utiliza una mínima radiación y es un estudio rápido de realizar. Se establecen los  valores en columna lumbar y cadera, de tal manera que se indica que existe osteopenia cuando los resultados de su índice “T-score” son entre -1.0 y -2.4, desviaciones estándar en comparación a una población de referencia con una densidad mineral ósea normal. Factores de riesgo que pueden desencadenar la osteopenia Los principales factores de riesgo para el desarrollo de la osteopenia son : El déficit de estrógenos asociado a la menopausia. La edad, a partir de los 50 años sobre todo. Cuanto mayor edad tenga el individuo, más riesgo existe de que este padezca osteopenia. Antecedentes familiares de osteopenia, osteoporosis o fracturas óseas. Toma de determinados fármacos como glucocorticoides sistémicos, heparina, anticonvulsivante…etc. Padecimiento de enfermedades como hipogonadismo (testículos u ovarios no funcionales), hiperparatiroidismo, artritis reumatoide, síndrome de malabsorción, enfermedad celíaca…etc. Alimentación deficiente y alteraciones alimentarias derivadas de patologías como anorexia o bulimia. Complicaciones de la osteopenia Desarrollo de osteoporosis. Fracturas óseas, siendo más frecuentes en columna, cadera y antebrazo. Desarrollo de alteraciones biomecánicas como pérdida de altura, deformidad en la columna, dorso-lumbalgias,  etc. Prevención de la osteopenia Realización de ejercicio físico aeróbico como caminar a paso vivo, correr, montar en bicicleta o saltar, por ejemplo. Garantizar una exposición solar diaria en manos, cara y brazos al menos durante 10-15 minutos al día, dos a tres veces por semana. Evitar el consumo de tabaco. Dieta variada y que contenga suficiente aporte de calcio (1gr/día en mujeres premenopáusicas; 1.2-1.5 gr/día durante el embarazo y la lactancia y 1.5 gr/día en mujeres postmenopáusicas). Evitar tóxicos como el alcohol y un exceso de ingesta de café. Especialidades a las que pertenece la osteopenia La osteopenia puede ser valorada y diagnosticada por el médico de atención primaria, el médico reumatólogo y el traumatólogo . En ocasiones, en las revisiones ginecológicas de las paciente en edad postmenopáusica, el ginecólogo también valora realizar una densitometría para diagnosticar la influencia de este proceso fisiológico en los huesos. Preguntas frecuentes ¿Qué debe comer una persona con osteopenia? Es recomendable comer alimentos ricos en calcio como leche, quesos, yogures, yema de huevo, frutos secos, legumbres, espinacas, grelo, brócoli, acelga, cardo, col lombarda…etc. También alimentos que contengan vitamina D como el pescado azul (salmón, sardinas o caballa) ¿Qué es la osteopenia periarticular? Es la pérdida de densidad mineral ósea producida alrededor de las articulaciones. ¿Cuál es el médico especialista en osteopenia? El reumatólogo es el médico especialista en osteopenia y osteoporosis. ¿Qué diferencia hay entre la osteopenia y la osteoporosis? La diferencia entre osteoporosis y osteopenia es la cuantía o importancia de la pérdida total de masa ósea del hueso. Así, se considera osteopenia la disminución de la densidad ósea comprendida entre 1 y 2.5 desviaciones estándar por debajo del valor de referencia de la población normal, y osteoporosis una densidad ósea inferior a 2.5 desviaciones estándar respecto al pico de masa ósea en adultos sanos. ¿Qué es el reuma? El término reuma no es un término médico, es una denominación coloquial para referirse al conjunto de patologías que afectan al aparato locomotor.
Espondilosis
Enfermedad

Espondilosis

¿Qué es la espondilosis? La espondilosis, también conocida como osteoartritis o artritis vertebral , es un proceso degenerativo y progresivo de los discos intervertebrales , que puede provocar la pérdida de estructura y función espinal normal. Es una patología que está caracterizada principalmente por el desgaste de los discos que se encuentran entre las vértebras de la columna. Dicha pérdida de volumen provoca episodios de dolor que pueden llegar a ser incapacitantes. Los discos intervertebrales son los que dan soporte a la columna al proveer amortiguación natural para mantener diferentes posturas. Este trastorno puede afectar las diferentes regiones de la columna como son cervical (cuello), torácica (parte media de la espalda), y lumbar (parte baja de la espalda). Es una enfermedad muy común, es más frecuente en hombres que en mujeres y  en personas entre los 40 a 60 años. Tipos de espondilosis Los tipos de espondilosis se clasifican según la zona de la columna vertebral más afectada por la enfermedad, como son: Espondilosis cervica l: es la condición que afecta a los discos intervertebrales en la parte alta de la espalda, así como a los huesos del cuello. Se caracteriza por dolor de cabeza, de hombros y cuello, siendo un padecimiento común en personas que soportan más estrés en la zona, como los deportistas. Espondilosis lumbar: es la que afecta el área lumbar de la espalda o parte baja. Este tipo de espondilosis es un tanto más común, debido a que tiene una estrecha relación con las lesiones deportivas. La mayoría de los dolores en esta zona tienen otros orígenes, aun cuando se demuestre la existencia del desgaste discal. Es muy común en mujeres, ya que tiene una relación directa con el periodo de gestación. Espondilosis dorsal: es un tipo muy poco común de esta condición, afectando la zona torácica. Los dolores o molestias de esta zona  son debidos principalmente a la edad, la mala postura o a trabajos muy pesados. Causas de la espondilosis La espondilosis, como muchas de las otras condiciones degenerativas que afectan a huesos y articulaciones, es producto de una vida de presión anormal y desgaste excesivo de la estructura ósea, debido a potenciales abusos físicos y al envejecimiento. Los discos actúan como amortiguadores entre las vértebras de la columna vertebral. Hacia los 40 años, los discos vertebrales de la mayoría de las personas comienzan a deshidratarse y a encogerse, lo que crea mayor contacto de los huesos entre las vértebras. La distribución inadecuada de la presión sobre la columna vertebral, las malas posturas por largos periodos de tiempo, las hernias en los discos, el crecimiento excesivo de huesos y la deshidratación de los discos, podrían ser otras causas. Síntomas de la espondilosis El principal síntoma de la espondilosis es el dolor en las diferentes zonas de la espalda, cercana al área desgastada, que puede parecer una distensión muscular. El dolor puede ser leve o profundo, y tan intenso, que incluso el paciente no puede moverse. Los síntomas a menudo se presentan de manera lenta con el tiempo, pero pueden comenzar o empeorar súbitamente. La inflamación o hernia de los discos vertebrales puede provocar dolor de cabeza, de espalda o inmovilidad de la zona afectada, lo cual también puede causar espasmos musculares y una crisis de dolor. Tratamiento de la espondilosis El objetivo del tratamiento de la espondilosis es aliviar el dolor, ayudar a mantener las actividades habituales tanto como sea posible, y evitar lesiones permanentes a la médula espinal y los nervios. Entre las opciones más comunes de tratamiento tenemos: la fisioterapia , que contribuye a reducir la incomodidad sufrida y a aliviar las tensiones entre los discos vertebrales, masajes especializados, quiropráctica, osteopatía, y las terapias de compresas frías en casa. El uso de medicamentos analgésicos y antiinflamatorios es común cuando el dolor se agudiza. En el último de los casos y solo cuando el paciente experimenta limitaciones en el movimiento, dolor insoportable o pérdida de la sensibilidad, el médico podría contemplar la opción quirúrgica. La cirugía para espondilosis se basa en aliviar la presión existente en la médula espinal y los nervios. Pruebas complementarias del diagnóstico de la espondilosis Para el diagnóstico y el tratamiento de la espondilosis se realizan pruebas como: radiografías , ya que con esta prueba el desgaste o la hernia discal serán visibles fácilmente. También puede realizarse una resonancia magnética o una tomografía axial computarizada, en las cuales el médico o especialista puede definir si el desgaste de los discos es el causante del dolor. Factores de riesgo de la espondilosis Entre los factores que aumentan el riesgo de tener la espondilosis están: la edad , ya que mientras más se envejece más riesgo se tiene de padecer esta enfermedad, los trabajos que requieren hacer movimientos repetitivos del cuello, adoptar una postura incómoda, el sobrepeso , tener una mala nutrición, ya que la descalcificación ósea es un factor principal para sufrir esta enfermedad, predisposición genética, tabaquismo y las lesiones traumáticas anteriores parecen aumentar el riesgo de espondilosis, entre otros factores. Complicaciones de la espondilosis  Si la médula espinal o las raíces nerviosas se comprimen gravemente como resultado de espondilosis el daño puede ser permanente. Otras complicaciones podrían incluir: Incapacidad para retener las heces o la orina. Pérdida de la función o sensibilidad muscular. Equilibrio deficiente. Prevención de la espondilosis Para prevenir esta enfermedad es necesario: Mantener una buena postura al sentarse o estar de pie. No levantar objetos pesados o hacerlo de manera apropiada. No fumar o tomar alcohol en exceso. Mantener un peso saludable. Hacer ejercicio periódicamente. Especialidades a las que pertenece Las especialidades médicas a las que pertenece la espondilosis son la ortopedia , que es la especialidad médica y quirúrgica dedicada a la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades y lesiones del sistema musculoesquelético. La neurocirugía, que se ocupa del diagnóstico y tratamiento de trastornos del cerebro, la médula espinal, la columna vertebral y los nervios periféricos de todas partes del cuerpo. Preguntas frecuentes ¿Qué es la espondilosis lumbar baja? La espondilosis lumbar baja es la que se da cuando el desgaste de los discos intervertebrales se encuentra en la región lumbar, la cual comprende entre las vértebras L1 a L5. ¿Cuáles son los signos de la espondilosis? La espondilosis presenta signos degenerativos en el cuerpo vertebral, con deformaciones y osteofitos (espolones óseos) que son proyecciones de hueso en forma de pico de loro. ¿Cuál es la zona lumbar de la espalda? La zona lumbar de la espalda comprende entre las vértebras L1 y L5. ¿Cuál es la zona cervical de la espalda? La zona cervical de la espalda comprende entre las vértebras C1 a C7.
Osteomielitis
Enfermedad

Osteomielitis

¿Qué es la osteomielitis? La osteomielitis es la infección de un hueso y la médula ósea, que se caracteriza por la destrucción progresiva inflamatoria del tejido óseo y que suele producirse principalmente por bacterias piogenas (que producen pus) así como, en algunos casos, por micobacterias y/u hongos. Involucra y afecta las diferentes estructuras óseas como el periostio, la cavidad medular, el endostio y en ocasiones vasos sanguíneos y nervios . Periostio : membrana de tejido conjuntivo, adherida exteriormente a los huesos, que sirve para su nutrición y regeneración. Cavidad medular : es el espacio interno de la diáfisis (parte tubular de un hueso largo), que contiene a la médula ósea amarilla grasa Endostio : membrana vascular delgada del tejido conjuntivo que rodea la superficie interior del tejido óseo que forma la cavidad medular de los huesos largo. Las infecciones pueden llegar al hueso a través del torrente sanguíneo o pueden diseminarse a través del tejido que lo rodea. Es más común en gestantes, niños y adultos de edad avanzada, aunque puede afectar a personas de todas las edades. Afecta más a los hombres que a las mujeres. La población con mayor riesgo incluye a las personas cuyo sistema inmunológico se encuentra debilitado. En niños con mayor frecuencia resultan afectados los huesos largos de brazos y piernas. En los adultos, la osteomielitis es más probable que se manifieste en los huesos de la columna vertebral. La destrucción ósea puede ser muy extensa si no se hace un diagnóstico rápido y se inicia el tratamiento. Tipos de osteomielitis Los tipos de osteomielitis incluyen: Osteomielitis aguda : es aquella que evoluciona en menos de dos semanas.  Es la infección bacteriana piógena (produce pus) localizada en huesos a partir de un área previamente infectada del organismo y que se denomina foco primario. El foco primario puede estar en intestino, oído medio, o a partir de piel: forúnculo, ántrax, celulitis…etc. Osteomielitis crónica : es la que evoluciona en más de cuatro semanas o que no responde al tratamiento antibiótico y requiere cirugía para su curación. Son los enfermos que una vez pasado el período agudo, con tratamiento o sin él, presentan supuración piógena crónica del hueso, siendo característica la presencia de secuestro, cavidades y fístulas. Osteomielitis no hematógena : la que ocurre por inoculación directa, tras un traumatismo o cirugía o por diseminación a partir de un foco contiguo, generalmente celulitis. Causas de la osteomielitis Las causas de la osteomielitis son principalmente bacterianas, debido al   Staphylococcus aureus . Los tipos de gérmenes que normalmente se encuentran en la piel o en la nariz de las personas sanas, provocan la mayoría de los casos de osteomielitis. Dependiendo de la forma en la que el hueso se infecta y de la edad de la persona, otros tipos de bacterias pueden también causar esta enfermedad. Las bacterias pueden infectar a los huesos de varias maneras, pudiendo llegar al hueso a través del torrente sanguíneo proveniente de otras áreas infectadas del cuerpo. Otra forma de contraer la osteomielitis es por una infección directa, cuando la bacteria entra en los tejidos del cuerpo a través de una herida y viaja hasta el hueso. Un hueso también puede infectarse cuando el riego sanguíneo al área del hueso se interrumpe. Esto puede ocurrir en las personas mayores que sufren de arteriosclerosis, lo cual es un estrechamiento de los vasos sanguíneos, o si hay una asociación con la diabetes. Síntomas de la osteomielitis Los síntomas de la osteomielitis incluyen: fiebre y/o escalofríos, dolor severo en el área del hueso infectado, irritabilidad o letargo en niños pequeños, hinchazón, así como calor y enrojecimiento sobre la zona de la infección. A veces la osteomielitis no produce signos ni síntomas o tiene signos y síntomas que son difíciles de distinguir de otros trastornos . Tratamiento para la osteomielitis La osteomielitis aguda requiere de tratamiento antibiótico que debe ser iniciado sin demora, aunque idealmente se debería obtener una muestra de material infeccioso previamente y comenzar el tratamiento en las primeras 72 horas desde el inicio del cuadro, pues en ese período el hueso aún conserva una adecuada irrigación sanguínea y el antibiótico llega mejor al foco infeccioso. En la osteomielitis crónica, además del uso de antibióticos de forma prolongada , en muchas ocasiones, se requiere cirugía, limpiando la zona afectada del material infeccioso, desbridando los tejidos muertos para facilitar la llegada del antibiótico, y rellenando los defectos óseos. También se puede aplicar un tratamiento antibiótico local en el hueso afectado. Pruebas complementarias del tratamiento de la osteomielitis Para el diagnóstico y tratamiento de la osteomielitis es necesario un análisis de sangre que puede revelar niveles altos de glóbulos blancos y otros factores que pueden indicar que el organismo está combatiendo una infección. Si la causa de la osteomielitis es una infección de la sangre , el análisis puede revelar qué gérmenes son los causantes. Otras pruebas importantes son las radiografías, que pueden revelar el daño en el hueso, o exploración por tomografía computarizada (escáner) y la resonancia magnética, así como la biopsia ósea. Factores desencadenantes de la osteomielitis No se conoce un factor específico que pueda desarrollar la osteomielitis. Factores de riesgo de la osteomielitis Los factores que aumentan el riesgo de la osteomielitis incluyen traumas, fracturas óseas graves o heridas punzantes profundas, ya que abren una vía para que las infecciones ingresen al hueso y al tejido que lo rodea. Otros factores de riesgo son los trastornos de la circulación, las afecciones que requieren vías intravenosas o sondas y los trastornos que afectan el sistema inmunitario . Las personas que se inyectan drogas intravenosas tienen más probabilidades de tener osteomielitis porque habitualmente usan agujas no estériles y no desinfectan la piel antes de las inyecciones. Gestantes y niños son de igual modo más propensos a esta enfermedad, así como las personas con diabetes, osteoartritis, neoplasias (tumores) o prótesis articulares. Complicaciones de la osteomielitis Las complicaciones de la osteomielitis incluyen: Muerte ósea (osteonecrosis). Alteración del crecimiento. Artritis séptica. Cáncer de piel. Prevención de la osteomielitis La prevención de la osteomielitis no siempre es posible porque no es una infección predecible, está más asociada a tomar medidas de protección para la salud que disminuyan los factores de riesgo, como: Evitar caídas o lesiones osteomusculares en niños y ancianos. Cuidado de fracturas óseas expuestas o que se puedan ver a través de la piel. Prevenir las infecciones de la piel debidas a diabetes mellitus. Desinfectar bien las heridas y tenerlas limpias y secas. Especialidades a las que pertenece la osteomielitis La osteomielitis pertenece a la especialidad de traumatología y ortopedia , es la parte de la medicina que se dedica al diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y prevención de lesiones y enfermedades del sistema musculoesquelético del cuerpo humano. Este complejo sistema incluye los huesos, las articulaciones, los ligamentos, los tendones, los músculos y los nervios que le permiten a una persona moverse, trabajar y ser activa. Preguntas frecuentes ¿Qué bacteria causa la osteomielitis? La bacteria más común que causa la osteomielitis es la Staphilococcus aureus , aunque existen otros tipos de micobacterias que también la pueden causar. ¿Qué es la osteomielitis maxilar? La osteomielitis maxilar es una infección odontógena de etiología bacteriana donde los agentes causales son los de la cavidad oral, como   Staphylococcus aureus entre otros. Afecta principalmente al maxilar inferior, y en raras ocasiones puede afectar al superior; esto es debido a que este tiene una mayor vascularización. ¿Qué es un absceso de Brodie? El absceso de Brodie es un absceso intraóseo relacionado con un foco de osteomielitis piógena sub-aguda definida por cierta características clínicas, radiológicas y patológicas. ¿Qué es la osteoesclerosis? La osteoesclerosis es una lesión consistente en un engrosamiento del hueso, aumento de su densidad, con posible disminución del espacio medular y la consiguiente atrofia de la médula ósea. ¿Qué es la pseudoartrosis? La pseudoartrosis es una articulación falsa que se forma después de una fractura cuyos fragmentos óseos no se han consolidado.